CAPÍTULO II: EJÉRCITO DE CHILE
El 18 de septiembre de 1810, la voluntad de ser una nación singular e independiente se expresó con especial fuerza entre los criollos chilenos. A partir de ese momento, la nueva nación buscó los medios con que conseguir emanciparse y se dotó de una fuerza militar capaz de hacer frente a la potencia colonial de la época: España. Desde entonces, el Ejército constituye una de las instituciones permanentes del Estado de Chile; su misión, formación, orgánica, capacidades y contribución al desarrollo del país se describen en el siguiente capítulo.
1. RESEÑA HISTÓRICA
El Ejército de Chile nació con y para la patria, contribuyendo decisivamente a forjarla. Sus orígenes se encuentran en las primeras fuerzas de carácter militar organizadas por los criollos, las que estuvieron inspiradas en las estructuras castrenses europeas, así como en el valor y audacia del nativo de nuestra tierra.
Uno de los modelos europeos que más directamente sirvió a la Junta Nacional de Gobierno para la creación del Ejército nacional, el 2 de diciembre de 1810, fue el del ejército permanente que España formó a partir de 1603 en la Capitanía General de Chile, por real cédula de Felipe III. La iniciativa respondió a una sugerencia hecha por el entonces gobernador de Chile, capitán Alonso de Ribera, a raíz del elevado número de bajas y pérdidas materiales que, después de sesenta años desde el inicio de la conquista, continuaba imponiendo la guerra de Arauco a las fuerzas españolas. Esta organización fue el primer ejército permanente creado en los territorios americanos bajo dominio de la monarquía hispana y constituyó una de las referencias castrenses más importantes para la fuerza militar que, dos siglos más tarde, formaron patriotas criollos para luchar por la independencia.
A partir de su creación, el Ejército nacional luchó con decisión y bizarría, entregando generosamente la sangre de sus soldados por la libertad de la nación chilena. Entre sus cuadros destacan las figuras de Bernardo O'Higgins y José Miguel Carrera. Los triunfos de Yerbas Buenas, San Carlos, Quechereguas, Chacabuco y los llanos de Maipo son la mejor muestra de sus progresivos esfuerzos por lograr la ansiada independencia. Tras las victorias de Chacabuco y Maipo, el libertador O'Higgins, desde su condición de Director Supremo, inició la consolidación republicana, gobernando el país desde 1817 a 1823. Entre sus numerosas e importantes obras, creó la Escuela Militar y la Escuadra Nacional, por lo que se le reconoce como el creador de las Fuerzas Armadas de Chile.
Tras la experiencia de la guerra de 1879 (Guerra del Pacífico), del Ejército fue objeto de una importante reforma orgánica (1906) a fin de actualizar sus estructuras bajo el modelo prusiano. Sobre esas bases, y a lo largo del siglo XX, continuó contribuyendo a la mantención de la paz. En 1994 la institución armada puso en práctica un proyecto integral de modernización, concebido para cubrir hasta el año 2010 y destinado, principalmente, a optimizar sus capacidades para enfrentar eficientemente los desafíos futuros.
Desde su organización inicial para conquistar y consolidar la independencia hasta la fecha, el Ejército de Chile ha entregado sus mayores esfuerzos para cumplir con las funciones que le competen como órgano fundamental de la República, destacándose sus triunfos en los campos de batalla, su contribución a la paz y aportes en materias de seguridad y desarrollo.
Su lema "Siempre vencedor, jamás vencido" sintetiza no sólo su entrega a los ideales y objetivos de la nación chilena, sino que, además, recuerda su invicta trayectoria en las duras jornadas de guerra que Chile ha debido enfrentar.
De este modo, la historia del Ejército se funde con la Patria, siendo parte importante de su epopeya y de una nación singular caracterizada, entre otras condiciones, por su capacidad para revertir situaciones criticas y distinguirse por sus rasgos de solidaridad y hospitalidad. En conjunto con las demás instancias oficiales de la comunidad nacional, se ha constituido en un factor de resguardo de los fundamentos de la nación y de la identidad histórico-cultural del país.
2. MISIÓN
El Ejército tiene por misión contribuir a garantizar, en forma permanente, la integridad territorial y la soberanía del país mediante una eficiente preparación y el correcto empleo de sus potenciales humanos y materiales.
Asimismo, le corresponde participar en la preservación de la seguridad de las fronteras terrestres de toda acción provocada desde el exterior y, en conformidad con la ley, en aquellas tareas de mantención del orden publico durante los estados de excepción que le competen, a objeto de dar estabilidad al desenvolvimiento nacional, asegurar la normalidad ciudadana y el libre ejercicio de sus instituciones fundamentales.
Para cumplir con esta misión, el Ejército realiza las siguientes actividades:
2.1. De carácter nacional
De las numerosas actividades que el Ejército lleva a cabo para cumplir con su misión constitucional, las de carácter fundamental y propiamente militares son: la instrucción, la docencia y el entrenamiento de combate. Además, cumple actividades que aportan al desarrollo nacional(83).
2.2. De carácter internacional
El Ejército está presente en actividades de mantenimiento de la paz con observadores militares en Medio Oriente, India-Pakistán y Perú-Ecuador. Asimismo, participa en la Junta Interamericana de Defensa y está representado en el Colegio Interamericano de Defensa, ambas instituciones relacionadas directamente con la Organización de Estados Americanos(84).
Además, el Ejército es miembro fundador de la Conferencia de Ejércitos Americanos, CEA, organismo castrense multilateral, que tiene como objetivo el realizar una estrecha integración y cooperación entre los ejércitos, para el estudio conjunto de los problemas de interés mutuo, dentro de los límites del continente americano, con el propósito de garantizar la seguridad y la defensa del continente contra todas las amenazas a la paz, la seguridad, la democracia y la libertad de los países miembros.
3. ORGÁNICA
3.1. Mando Superior
Básicamente el Ejército está constituido por su mando superior radicado en la Comandancia en Jefe, siendo su máxima autoridad institucional. Para el desarrollo de sus tareas, cuenta con el Estado Mayor General del Ejercito como organismo de asesoría principal para la toma de decisiones, entidad que se encuentra organizada en una serie de direcciones que representan las principales funciones de la gestión institucional. Bajo el mando del Comandante en Jefe están las distintas Unidades Operativas que cubren el territorio nacional, a los que se agregan los Comandos de Apoyo de Combate, Logístico y Administrativo. Como organismo de control de las actividades institucionales se desempeña la Inspectoría General del Ejército.
3.2. Unidades Operativas
La presencia del Ejército se materializa físicamente a través de las diferentes guarniciones militares del país, desde el altiplano, en el extremo norte, hasta la Antártica chilena. En lo fundamental, los medios que las cubren pertenecen a determinadas Unidades Operativas que, dependiendo de los medios que las conforman, reciben la denominación de Cuerpos de Ejército o Divisiones, bajo cuya jurisdicción se encuentran ciertas unidades tácticas denominadas Regimientos o Batallones. El despliegue de paz de estas Unidades Operativas es el siguiente:
* 1er. Cuerpo de Ejército: es la unidad operativa que cubre la I Región, de Tarapacá, y sus unidades dependientes se encuentran desplegadas en las guarniciones de Arica, Putre, Iquique y Baquedano.
* Ia. División de Ejército: corresponde a la jurisdicción de las Regiones II y III, con su Cuartel General en la ciudad de Antofagasta.
* IIa. División de Ejército: cubre las Regiones IV, V, VI y Región Metropolitana , con Cuartel General en la ciudad de Santiago.
* IIIa. División de Ejército: cubre la jurisdicción de las Regiones VII y VIII, son su Cuartel General en la ciudad de Concepción.
* IVa. División de Ejército: se encuentra desplegada en las Regiones IX y X, con Cuartel General en la ciudad de Valdivia.
* VIIa. División de Ejército: cubre la zona jurisdiccional de la Región XI, con su Cuartel General en la ciudad de Coyhaique.
* Va. División de Ejército: cubre la jurisdicción de la Región XII, con Cuartel General en la ciudad de Punta Arenas.
3.3. Organización de Apoyo Administrativo y Logístico
Los organismos que proporcionan apoyo administrativo, logístico y técnico a las distintas unidades del Ejército dependen directamente del Vice Comandante en Jefe del Ejército y son:
* Comando de Apoyo Logístico (CALE)
* Comando de Apoyo Administrativo (CAAE)
* Comando de Industria Militar e Ingeniera (CIMI)
* Comando de Ingeniería (C.INGE)
* Comando de Telecomunicaciones (C.TELE)
Dentro de estos Comandos es importante destacar el CIMI, al cual pertenecen, entre otros, las siguientes reparticiones que pueden prestar servicios a otros organismos del Estado.
3.3.1. Fábrica y Maestranza del Ejército (FAMAE)
FAMAE constituye una corporación de derecho público que goza de personalidad jurídica, administración autónoma y patrimonio propio. Tiene por objeto la fabricación y mantenimiento de elementos bélicos para satisfacer las necesidades de la Defensa Nacional, en general y el Ejército, en particular. Para cumplir con tal propósito, la empresa FAMAE puede constituir o formar parte de sociedades públicas o privadas, como asimismo fabricar y comercializar maquinarias, herramientas y artículos de uso industrial(85).
3.3.2. Instituto Geográfico Militar (IGM)
Tiene por misión elaborar la cartografía que necesita el Ejército y proporciona, asimismo, cartografía para otras actividades, tales como minería, atlas y mapas para la educación, etc. Es la autoridad nacional en materia de cartografía terrestre.
3.3.3. Instituto de Investigación y Control (IDIC)
Tiene por misión efectuar el control de calidad de todos los elementos adquiridos por el Ejército. A su vez, puede prestar, eventualmente, servicios a otras empresas del Estado, en lo relativo a control de calidad.
3.4. Armas y Servicios
Además, el Ejército está conformado por una serie de armas y servicios que cumplen funciones acordes con sus características, tanto en forma individual como de carácter combinado. Dentro de las armas están la infantería, la artillería, la caballería blindada, la ingeniería y las telecomunicaciones. En los segundos, están los servicios logísticos de material de guerra, intendencia, transporte, sanidad y veterinaria, así como los servicios administrativos de ayudantía general, justicia militar, policía militar, sepulturas, reemplazos, religioso, correos y bienestar.
Orgánica del Ejército
4. PROCESO FORMATIVO
La docencia se encuentra bajo la responsabilidad del Comando de Institutos Militares que, a través de sus academias, escuelas matrices, de armas y de especialidades, desarrolla las actividades de enseñanza dirigidas al personal de la planta institucional, con el objeto de que éste obtenga niveles de capacidad profesional y especializada, que les permita asumir las exigencias de las diversas jerarquías en materias de mando, control y ejecución, propias de las características de la carrera militar. Se indica a continuación el proceso formativo docente de oficiales y cuadro permanente.
4.1. Oficiales
4.1.1. Formación básica
La Escuela Militar tiene por misión la formación básica e integral de los oficiales de ejército en las categorías de armas, servicios y servicio femenino militar, a fin de que los alféreces que cada año se gradúan puedan continuar posteriormente en las escuelas de las armas o servicios, formándose como comandantes de nivel sección o pelotón.
4.1.2. Capacitación profesional
Por estar la carrera de las armas directamente asociada a una progresiva evolución a través de diversas jerarquías, la planificación institucional considera una sistemática capacitación de sus cuadros de oficiales, a fin de que puedan ejercer con la mayor eficiencia posible los distintos cargos o deberes bajo su responsabilidad, sea en función al arma o servicio al que pertenecen como a la especialización que va adquiriendo a través del desenvolvimiento profesional. La responsabilidad mayor en estas materias la tiene el Comando de Institutos Militares, organismo del cual dependen las escuelas de armas y especialidades.
Las diversas armas que configuran el Ejército cuentan con sendas escuelas donde, en lo fundamental, se perfeccionan las modalidades táctico-técnicas específicas de infantería, artillería, caballería blindada, ingenieros y telecomunicaciones. La misión de estos institutos es impartir la docencia en los cursos de requisito de ascenso para oficiales y clases, a la vez que deben mantener actualizada la doctrina de la respectiva arma.
Además, los oficiales pueden acceder a especialidades secundarias de combate y docencia, en escuelas especialmente establecidas para estos fines. Dentro de ellas se encuentran las especialidades de instructor de montaña, comandos, instructor en educación física, especialista en inteligencia, observador aéreo, paracaidista, buzo táctico y maestro de equitación.
4.1.3. Educación superior
Dentro de la especialización superior, se encuentran las Academias de Guerra y Militar Politécnica que, de acuerdo con la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza, constituyen institutos de educación superior. En consecuencia, cuentan con las necesarias atribuciones para ejecutar las funciones de docencia, investigación y extensión.
La primera de las nombradas forma oficiales de Estado Mayor y la segunda Ingenieros Militares Politécnicos. Ambas consideran en sus actuales planificaciones anuales el otorgamiento de licenciaturas en ciencia militar y el desarrollo de programas de magíster en ciencia militar; en este último caso, pueden participar alumnos civiles y extranjeros. Los señalados grados académicos se otorgan con menciones ajustadas a los fines educacionales que cada una de estas academias persigue. Asimismo, están encargadas de la formación de los profesores de academia necesarios para cubrir las exigencias docentes de cada uno de los institutos.
4.2. Cuadro Permanente
4.2.1. Formación básica
La formación básica se produce en la Escuela de Suboficiales. La duración de los estudios es de dos años, en los que se entregan conocimientos profesionales y técnicos para el desempeño profesional de los futuros clases, destinados a prestar servicios en las diferentes unidades y reparticiones del ejército.
4.2.2. Capacitación profesional
Tal como se mencionara anteriormente para el caso de los oficiales, las escuelas de armas proporcionan la capacitación táctico-técnica, requisito exigido para ascender a los grados superiores de acuerdo a las necesidades institucionales.
Además, los suboficiales y clases pueden obtener especializaciones secundarias de combate o docencia en escuelas establecidas para esos fines. Entre otros, estos institutos otorgan títulos de instructor en educación física, especialista en inteligencia, instructor de montaña, observador aéreo, comando, paracaidista y buzo táctico.
Existen, también, otras áreas de especialización para los suboficiales y clases, que les permiten obtener títulos de armeros artificieros, mecánicos de motores (automóviles, carros blindados, aviones, grupos electrógenos), técnicos electrónicos, músicos, herradores forjadores, ecónomos y cocineros.
5. CAPACIDADES Y MEDIOS
Dentro de su estructura de empleo combinado, el Ejército dispone de un equilibrado inventario de medios materiales distribuidos conforme a la estructura orgánica de las diversas Unidades Operativas, la que, a su vez, obedece a los objetivos que cada una de ellas tiene asignado y a las características del escenario en el cual se considera su empleo.
Entre estos medios, se destacan carros blindados empleados por las unidades de infantería mecanizada, cañones sin retroceso y morteros de diferentes calibres, considerados en las armas de combate; artillería autopropulsada, motorizada y lanzadores múltiples de cohetes; carros blindados, tanques repotenciados en el país y otros de diferentes tipos, integrando las unidades blindadas.
Se suman a los anteriores, helicópteros y aviones de transporte de la Aviación de Ejercito. A todos ellos se une el material técnico de ingenieros y telecomunicaciones, mediante cuyo empleo en beneficio de la maniobra, además de aquellos recursos que otorgan apoyo administrativo y logístico, se asegura el éxito de las operaciones.
Lo anterior se complementa con las capacidades de la industria militar, representada fundamentalmente por la Fábrica y Maestranzas del Ejército (FAMAE) cuyo desarrollo tecnológico le permite la fabricación de armamentos de diferente tipo y calibres, vehículos blindados, cohetes y municiones necesarias para proveer al Ejército y otras instituciones.
En este campo adquiere especial relevancia el desarrollo del Sistema de Entrenamiento Táctico Computarizado (SETAC), que permite entrenar, mediante el sistema de simuladores, a los diferentes mandos en la conducción militar de sus unidades.
Por otra parte, el Ejército ha estado permanentemente preocupado de su proyección futura institucional. El lineamiento general considera estructurar un Ejército potente y equilibrado, con capacidad de incrementarse con medios provenientes de la movilización; es decir, que sea flexible y rápido, de manera que pueda actuar en cualquier parte del territorio nacional, que posea un óptimo entrenamiento y venga un alto nivel tecnológico. De esta forma, estará en condiciones de contribuir a la disuasión de los potenciales adversarios o a la victoria, si la guerra es inevitable.
Para ello, se encuentra en proceso de ejecución un plan de modernización institucional denominado "Alcázar", el que incluye todas aquellas previsiones y medidas destinadas a materializar los importantes cambios que se deben adoptar para concretar lo anterior. Éstos, en lo general, apuntan a modificaciones de la estructura orgánica tanto en los sistemas de instrucción, docencia y entrenamiento, incrementando el uso de la tecnología, como también respecto del bienestar del personal y el despliegue de las unidades.
Todo lo anterior, para enfrentar con éxito los desafíos futuros y continuar cumpliendo en forma fiel y eficiente con las tradicionales obligaciones del Ejército en la sociedad chilena, fundamentado en los valores esenciales de nuestra nacionalidad y las virtudes propias de la vocación militar al servicio de la Patria.
6. CONTRIBUCIÓN AL DESARROLLO
El Ejército contribuye al desarrollo nacional en diferentes áreas del quehacer del país, destacándose la acción del Cuerpo Militar del Trabajo (C.M.T.), dirigida a abrir brechas de penetración en las zonas de "fronteras interiores" y construcción de vías de comunicaciones terrestres en áreas de difícil acceso y aisladas. En el año 1996 se llegó a un total de 3.529 Kms. construidos y se tenían proyectados otros 565 Kms. Asimismo, se contempla la posibilidad de construir alrededor de 935 Kms. para continuar la carretera longitudinal austral hacia la XII Región.
La construcción de la carretera austral ha sido la obra de mayor relevancia emprendida por el C.M.T., con una longitud de 1.150 Kms. desde el Río Bravo (X Región) hasta Villa O'Higgins (XI Región), a los que se suman 229 Kms. de caminos transversales, integrando a la vida nacional a una sexta parte del territorio.
Es preciso agregar las importantes contribuciones de la industria militar a determinadas actividades nacionales e internacionales, destacándose aquellas provenientes del Instituto Geográfico Militar, FAMAE, el Complejo Químico e Industrial y el Instituto de Investigación y Control, así como la importante misión en beneficio de la soberanía y de las actividades científicas que realiza la dotación que cubre la base militar "General Bernardo O'Higgins" en la Antártica.
Todo este aporte al Desarrollo Nacional se ve materializado por medio de las siguientes áreas de acción:
* Confección de cartografía del territorio nacional y difusión de la geografía: Su aporte específico se materializa en la confección de la cartografía oficial del país, de diversos tipos y escalas, que sirven a la minería, obras públicas, urbanización, salud y estadísticas y, en general, a las decisiones relativas al desarrollo que toman las autoridades administrativas a nivel regional, provincial y comunal.
* Investigación científica y tecnológica: Se realiza con participación o convenios con entes privados y universitarios, que han tenido como resultante la integración de conocimientos en beneficio de la institución y con importantes derivaciones hacia las áreas de desarrollo privadas.
* Desarrollo de zonas aisladas: La presencia de unidades del Ejército en zonas aisladas y alejadas de los centros vitales genera un polo de atracción para la vida humana o nacimiento de una comunidad. La historia de nuestro país está mareada por situaciones en que surgen núcleos poblacionales en forma posterior a la presencia militar o, en su defecto, la presencia militar ha permitido la mantención y desarrollo de un grupo social.
* Industrial: La manufactura militar es aprovechada para la fabricación de herramientas y artículos necesarios para la producción nacional. Junto a lo anterior, la producción química militar elabora explosivos, propelentes e insumos empleados en la industria y minería.
* Banco de Pruebas y Control de Armas: Desempeña las funciones y atribuciones que, como servicio oficial del Estado le corresponden en relación con el Banco de Pruebas y Control de Armas.
* Fomento del ganado equino del país: Ejerce las funciones y atribuciones destinadas al fomento y mejoramiento en la calidad del ganado equino agrícola del país.
* Obras públicas para la administración del Estado: Junto al Ministerio de Obras Públicas desarrolla proyectos de construcción de caminos que, no siendo rentables para la empresa privada, son importantes para el Desarrollo Nacional, especialmente en aquellas áreas consideradas como "fronteras interiores críticas".
* Asesoría especializada: Orientada hacia áreas como política exterior y situaciones de catástrofes naturales, en las cuales la institución cuenta con personal capacitado y entrenado para brindar una asesoría especializada a organismos del Estado que la requieran.
* Instrucción de la Defensa Civil: A nivel comunal, la Defensa Civil de Chile es instruida y administrada por las unidades militares que en ellas se encuentran. De esta forma, el comandante de la unidad táctica, al ser designado por ley como responsable de esta organización, establece un estrecho vínculo de ella con el Ejército.
* Protección del medio ambiente: La preocupación del Ejército se ha materializado a través de su participación en congresos, seminarios, desarrollo de proyectos, y cooperación en la prevención de la contaminación atmosférica. Esto se caracteriza, entre otras cosas, con la reforestación en terrenos de la institución.
* Aporte cultural: El Ejército aporta al desarrollo de la cultura nacional a través de sus estudios y publicaciones en temas de su competencia, como historia y estrategia militar, geográfica y geopolítica, entre otros. Junto a las publicaciones, estos aportes son difundidos a través de sus institutos de enseñanza y centros de estudios.
* Mediante el Servicio Militar Obligatorio: Año a año, el Ejército instruye y entrega a la comunidad nacional miles de jóvenes capacitados en materias netamente militar, valores patrios, disciplina y educación cívica. Además, se debe considerar en este ámbito la instrucción de contingente en cursos técnicos de capacitación, agrícola, de enfermería, radio operadores, carpintería, electricidad, mecánicos y otros.
Por lo anterior, el Ejército junto con cumplir con la misión específica que le fija el Estado, contribuye, con los recursos que le son asignados, a posibilitar el Bien Común y el desarrollo de toda la Nación.
CAPÍTULO III: ARMADA DE CHILE
Junto a la organización de fuerzas terrestres, la nación chilena debió dotarse tempranamente de fuerzas navales. La emancipación no podía estar asegurada sin el control del mar y de las rutas oceánicas que le permitían a Chile, por una parte, negar a las tropas españolas el acceso a sus costas y, por la otra, mantener el comercio internacional y de cabotaje para su subsistencia. Este capítulo reseña el nacimiento de la Armada Nacional y describe su misión, la formación de su personal, su orgánica, sus capacidades y la contribución que hace al desarrollo del país.
1. RESEÑA HISTÓRICA
Para un país como el nuestro, ejercer el dominio del mar es una necesidad vital. Chile conoció de esta necesidad cuando nacía a la vida como nación independiente. En efecto, una de las primeras medidas de la Junta de Gobierno instaurada el 18 de Septiembre de 1810, fue el abrir los puertos nacionales al comercio mundial. Esto significaba vulnerar las disposiciones de la corona española, que lo prohibía. Ante esta situación, el Virrey del Perú, Fernando de Abascal (1811 - 1812) armó corsarios para bloquear los puertos chilenos e impedir el libre comercio. El temor iba más allá de lo comercial, pues se quería impedir la entrada de ideas propaladas por la Revolución Francesa y la introducción de armamento de contrabando.
El año 1813, la Primera Junta de Gobierno decidió organizar una defensa naval, por lo que le encomendó al Gobernador de Valparaíso, Francisco de la Lastra, hacer algunas adquisiciones. De la Lastra, que se había educado en la marina española, arrendó una fragata norteamericana -la "Perla"- y compró un bergantín -el "Potrillo"-, armándolos con cañones y rifles. Éste fue el germen del Poder Naval de Chile.
Más tarde, cuando O'Higgins marchó a Mendoza, después de la derrota de Rancagua que puso fin a la Patria Vieja (1810-1814), lo hizo con la impresión de que esta derrota se debía principalmente a la falta de un Poder Naval, que hubiera podido oponerse al desembarco enemigo.
Durante la Reconquista (1814-1818), los españoles restauraron su régimen. Dueños absolutos del mar, no tuvieron problemas para desembarcar tropas en Arauco y hacer simulacros en otros lugares del litoral, distrayendo la atención de los patriotas y obligándolos a dividir sus fuerzas. Esta notable desventaja para las fuerzas chilenas fue producto de la pérdida del dominio del mar, situación que se prolongó hasta la batalla de Chacabuco (12 de febrero de 1817). Tras la victoria, O'Higgins pronunció la frase que ha pasado a ser el principio básico de nuestra estrategia naval: "Este triunfo y cien más se harán insignificantes si no dominamos el mar".
Al poco tiempo, los patriotas apresaron en Valparaíso al bergantín de comercio español "Águila" (26 de febrero de 1817), de 220 toneladas. Armado con 16 cañones, fue puesto al mando del Oficial de Artillería, el irlandés Raimundo Morris, que a pesar de ser oficial del Regimiento "Cazadores de Los Andes", había servido en la marina británica hasta el grado de teniente. Se debe reconocer, pues, a don Raimundo Morris, como el primer Oficial de Marina chileno y al "Águila", tripulado con 90 hombres, como el primer buque de la Escuadra chilena y punto de partida del Poder Naval de Chile. Desde esa fecha, ha ido consolidándose una institución que nació con la Patria y que le ha dado enormes satisfacciones en la paz y la guerra: la Armada de Chile.
2. MISIÓN
La Armada de Chile tiene como misión fundamental el participar permanentemente en la seguridad exterior y defensa militar del país en resguardo de su soberanía e integridad territorial, mediante las siguientes acciones:
2.1. En tiempo de guerra
* Desarrollar operaciones destinadas a permitir que Chile pueda, en todo momento, hacer libre uso del mar como vía de comunicaciones para sostener el esfuerzo de la guerra, mantener abastecida a la población y las industrias, y salvaguardar el comercio internacional. Negar, simultáneamente, este privilegio al adversario, de manera de robustecer por un lado el esfuerzo bélico de la nación, mientras se debilita el equivalente del enemigo, en beneficio de un desenlace victorioso para las armas del país.
* Proyectar el poder militar de la nación sobre el territorio adversario y, a su vez, impedir la proyección del poder militar adversario desde el mar.
* Apoyar el esfuerzo bélico de otras ramas de las FF.AA.
2.2. En tiempo de paz
* Contribuir al desarrollo del Poderío Marítimo de Chile, brindando seguridad a la navegación, fomentando las actividades marítimas y el desarrollo portuario, manteniendo la cartografía y la señalización marítima, y efectuando inspecciones y vigilancia que otorguen seguridad a la vida humana en el mar.
* Vigilar el Territorio Oceánico Nacional, compuesto por las Aguas Interiores, Mar Territorial, Zona Económica Exclusiva y Mar Presencial, resguardando la seguridad y los intereses nacionales, así como la integridad del medio ambiente acuático.
* Apoyar el desarrollo nacional, comunicando por mar zonas aisladas y asistiendo a quienes habitan en ellas.
3. ORGÁNICA
3.1. Mando superior
El mando superior es ejercido por un Almirante, con el cargo de Comandante en Jefe de la Armada, quien es asesorado por el Estado Mayor General en materias estratégicas, operativas y de gestión, planificando, coordinando y controlando el quehacer de la Institución. Además, en el desempeño de sus funciones, el Comandante en Jefe cuenta con el apoyo de los siguientes organismos, que dependen directamente de él:
* Dirección de Inteligencia
* Auditoría General
* Servicio de Relaciones Públicas
* Contraloría
Por su parte, como complemento de sus tareas de asesoría, el Estado Mayor General, que está a cargo de un vicealmirante, cuenta con los siguientes organismos bajo su dependencia directa:
* Servicio de Telecomunicaciones
* Servicio de Informática
* Servicio Hidrográfico y Oceanográfico
* Academia de Guerra Naval
Dependiendo del Comandante en Jefe existen dos niveles organizacionales: un nivel administrativo, compuesto por las Direcciones Generales, y un nivel operativo, integrado por los Mandos Operativos y de Apoyo Operativo.
3.2. Nivel administrativo
En este nivel existen tres Direcciones Generales, cada una a cargo de un vicealmirante: la Dirección General de los Servicios, del Personal, y la del Territorio Marítimo y Marina Mercante.
3.2.1. Dirección General de los Servicios de la Armada (DGSA)
Es el organismo logístico del material de más alto nivel de la Institución, que tiene la responsabilidad de administrar los recursos financieros y proveer los recursos materiales y tecnológicos de la Armada con el propósito de contribuir al cumplimiento de la misión permanente de la institución. Para cumplir con sus funciones, tiene bajo su dependencia y control a las siguientes direcciones y organismos:
* Dirección de Armamentos
* Dirección de Ingeniería
* Dirección de Programas, Investigación y Desarrollo
* Dirección de Abastecimiento y Contabilidad
* Dirección de Recuperación de Unidades
* Servicio de Obras y Construcciones
* Servicio de Información Administrativa de Mantenimiento
* Misiones Navales en el Extranjero
3.2.2. Dirección General del Personal de la Armada (DGPA)
Tiene por misión seleccionar, formar, promover y mantener personal altamente calificado para el desempeño de sus funciones, no solamente en el aspecto técnico profesional, sino también en aquellas virtudes que aportan la recia fortaleza étnica-espiritual necesaria para enfrentar las duras exigencias de la guerra en el mar con una elevada moral combativa. La Dirección General del Personal administra los recursos humanos con la participación de los siguientes organismos de su dependencia:
* Dirección de Educación
* Dirección de Sanidad Naval
* Dirección de Bienestar Social
* Servicio Religioso
3.2.3. Dirección General del Territorio Marítimo y Marina Mercante (DGTM)
Le corresponde velar por la seguridad de la navegación marítima fluvial y lacustre, proteger la vida humana en la zona marítima de jurisdicción nacional, y cautelar el normal desenvolvimiento de los intereses marítimos del país, para así contribuir al desarrollo del Poderío Marítimo Nacional. En el cumplimiento de estas funciones, se distinguen cuatro áreas de acción que comprenden las siguientes actividades:
a) Operaciones Marítimas:
* Control y seguridad en las actividades portuarias
* Servicios de búsqueda y rescate marítimo
* Control del tráfico marítimo
* Servicio de telecomunicaciones marítimas
b) Seguridad en la Operación de la Marina Mercante:
* Inspección de naves mercantes
* Investigación de siniestros y accidentes marítimos
* Titulación y matrícula de las tripulaciones
* Embarco y desembarco de navegantes
* Control y emisión de documentación en las naves
* Control y regulación de la navegación deportiva
c) Protección y Control del Medio Ambiente Marino:
* Prevención y control de la contaminación del mar
* Ayudas a la navegación
* Servicio de practicaje y pilotaje
* Control y fiscalización de los bienes marítimos nacionales
d) Alistamiento Naval;
* Control de los servicios marítimo-portuarios
* Movilización de la Marina Mercante Nacional
* Verificación de la neutralidad de los mercantes
3.3. Nivel Operativo
Este nivel está integrado por las Fuerzas Navales, cuyo mando es ejercido por medio del los Mandos Operativos -que son la Escuadra, la Fuerzas de Submarinos y las Cuatro Zonas Navales- y de los Mandos de Apoyo Operativo, constituidos por la Aviación Naval, el Cuerpo de Infantería de Marina y las Fuerzas Especiales.
Los Mandos Operativos, dependiendo de su misión, tienen asignados buques, aviones, medios anfibios y fuerzas especiales, medios con los que efectúan entrenamiento avanzado durante la paz, para su empleo estratégico en caso de conflicto. Los Mandos de Apoyo Operativo, en cambio, tienen la responsabilidad de efectuar el entrenamiento básico e intermedio de sus medios característicos, para posteriormente asignarlos a los Mandos Operativos para su entrenamiento avanzado y empleo de las operaciones que se haya planificado. Es decir, los mandos de Apoyo Operativo entregan sus medios ya entrenados a los Mandos Operativos, para que éstos efectúen las operaciones navales que corresponda(86).
Las Zonas Navales, por su parte, cumplen un triple papel. Son las bases logísticas que apoyan a los Mandos Operativos; a la vez, tienen medios navales que les permiten montar ciertas operaciones, por lo que son también Mandos Operativos; y, por último, tienen la importante misión de mantener el control de las aguas y el litoral en sus respectivas jurisdicciones. Existen cuatro Zonas Navales que, de norte a sur, son las siguientes:
* Cuarta Zona Naval, cuya Comandancia en Jefe se encuentra en Iquique, ejerce su accionar desde el límite político internacional norte hasta Chañaral.
* La Primera Zona Naval, con asiento en Valparaíso, tiene su jurisdicción desde Chañaral hasta Punta Topocalma, al sur de San Antonio.
* La Segunda Zona Naval, con sede en Talcahuano, posee jurisdicción desde la Punta Topocalma hasta el Cabo Raper, en el extremo norte del Golfo de Penas.
* La Tercera Zona Naval, con siento en Punta Arenas, tiene un ámbito jurisdiccional desde el Cabo Raper hasta el Polo Sur.
Las Zonas Navales extremas, Tercera y Cuarta, poseen medios operativos de alta movilidad y poder ofensivo capaces de reaccionar prontamente ante una emergencia, mientras concurren otros medios al área. En la Cuarta Zona Naval se cuenta con lanchas misileras tipo SAAR 4, de origen israelí, armadas con misiles anti-buque y dos cañones anti-aéreos y de superficie. En la Tercera Zona Naval operan las lanchas misileras tipo SAAR 3, similares a las anteriores, pero de menor tamaño y un sólo cañón.
3.4. Los Astilleros y Maestranzas de la Armada (ASMAR)
Mención especial dentro de la orgánica de la Armada merece ASMAR. Ésta es una empresa autónoma del Estado que ha pasado a convertirse en un complejo industrial altamente profesional, capaz de satisfacer las cada vez mas complicadas exigencias en la carena, mantención, reparación y construcción de los buque; de la Armada de Chile, como asimismo de las naves de la Marina Mercante Nacional. Cuenta con tres astilleros muy bien equipados, ubicados en Valparaíso, Magallanes y Talcahuano. Este último es el más importante y de mayor capacidad.
ASMAR fue creado el 6 de abril de 1960 y es heredero de los antiguos Arsenales de la Armada, cuya actividad data de 1836. La experiencia y pericia adquiridas lo han llevado a desarrollar importantes planes para el futuro y a una continua modernización y expansión de sus instalaciones. Cuenta con una gran capacidad tecnológica, producto del intensivo entrenamiento de su mano de obra calificada, que se efectúa en las Escuelas de Especialidades de la Armada y en el extranjero, y la acertada dirección de sus ingenieros y técnicos.
En 1997, el "Lloyd's Register Quality Assurance" (LRQA) entregó los certificados que acreditan a la planta de ASMAR (T) como una empresa que satisface las exigencias internacionales de calidad ISO-9001, siendo el primer astillero latinoamericano y la primera industria pesada en Chile en obtener este importante reconocimiento.
Orgánica de la Armada
4. PROCESO FORMATIVO
El proceso formativo del hombre de mar es de responsabilidad de la Dirección General del Personal, por intermedio de la Dirección de Educación de la Armada, la que está a cargo de un contraalmirante. Este proceso abarca desde la selección de los postulantes a la carrera naval hasta la entrega a la flota de hombres moral y profesionalmente aptos para combatir en el mar, operando equipos y maquinarias de complicada tecnología. El proceso es constantemente evaluado y los comandantes de buques proporcionan a la Dirección de Educación de la Armada la necesaria retroalimentación para poder satisfacer exactamente las exigencias del servicio a flote.
El proceso de formación básica se inicia en las Escuelas matrices, continúa en un nivel técnico-profesional en la Academia Politécnica y finaliza en un nivel de posgrado en la Academia de Guerra Naval.
4.1. Escuelas Matrices
Las Escuelas Matrices son los establecimientos destinados a captar y formar a los hombres que optaron por la profesión del mar, desde donde egresan capacitados para desempeñar funciones operativas. Las Escuelas Matrices de la Armada son:
* La Escuela Naval, ubicada en Valparaíso, que forma a los futuros Oficiales en un programa de cuatro años, egresando como Guardiamarinas.
* La Escuela de Grumetes, en la isla Quiriquina, frente Talcahuano, que forma al personal de Gente de Mar, egresando como Marineros al cabo de dos años de estudio.
* La Escuela de Infantería de Marina, en Viña del Mar, que forma a los futuros soldados I.M. de planta, en un programa de dos años.
* La Escuela de Artesanos Navales, en Talcahuano, que prepara al personal naval técnico en un programa de tres años, para luego desempeñarse en los astilleros y establecimientos terrestres.
4.2. Academia de Guerra Naval
Después de algunos años de complementación técnico-práctica a bordo, tanto los oficiales como el personal de gente de mar son destinados a las distintas Escuelas de Especialidades de la Academia Politécnica, donde se les proporciona conocimientos adicionales en las diferentes tecnologías, encaminadas a optimizar el empleo táctico y la mantención del material instalado en los buques. Se trata de que el personal de la Armada conduzca, opere, sostenga y desarrolle eficazmente los medios que la institución pone a su cargo. La Academia Politécnica Naval tiene por misión:
* Especializar a Oficiales y Gente de Mar, otorgándoles las competencias operativas, técnicas y administrativas requeridas por la Institución;
* Perfeccionar al personal especialista, actualizando sus competencias operativas, técnicas y administrativas de acuerdo al desarrollo institucional;
* Adicionalmente, capacitar a Empleados Civiles y Profesores Civiles, otorgándoles las competencias técnicas y administrativas requeridas por la Armada.
Conforman la Academia Politécnica Naval, las Escuelas de Especialidades de Ingeniería, Operaciones, Armamentos, Abastecimiento, Aviación Naval, Submarinos, Infantería de Marina, Sanidad, y Litoral y Faros. Tiene atribuciones legales para otorgar títulos de especialidad, títulos técnicos de nivel superior y profesional, y grados académicos.
4.3. Academia de Guerra Naval
A este alto instituto concurren los oficiales después de 15 a 20 años de servicios, durante dos años, para adiestrarlos en los aspectos de conducción estratégica y administración superior de la institución. Su objetivo es asegurar el empleo eficaz de la fuerza en la paz y en la guerra, mediante la capacitación de quienes han de conducirla y apoyarla; preparar un cuerpo de asesores para estos mandos, y contribuir a la creación, estudio y difusión de la doctrina del empleo de los medios navales. Sus actividades se centran en la preparación de oficiales de mediana graduación para el desempeño del mando superior, y en la formación de oficiales especialistas en Estado Mayor. La elaboración doctrinal es el fruto del trabajo, el estudio y el contraste de conocimiento y experiencias de profesores y alumnos que, al hacer escuela, decantan principios, normas, criterios y procedimientos.
5. CAPACIDADES Y MEDIOS
Las capacidades y medios de la Armada están materializados en el Poder Naval. El Poder Naval es una ecuación en la que intervienen tres factores: la Fuerza, la Posición y la Voluntad Estratégica. La Fuerza se refiere a los buques, aviones, submarinos, etc., más los hombres que los operan, los mantienen y crean nuevas tácticas de empleo. La Posición es el área geográfica ubicada próxima a los intereses que se desea proteger interferir o conquistar, y en la cual la Fuerza encuentra apoyo para operar. Por último, la Voluntad Estratégica es la decisión que se tiene para hacer uso de la Fuerza, operando desde una determinada Posición.
El Poder Naval representa al poder militar que ejercen las Fuerzas Navales tanto en la superficie del mar como bajo ella, así como en el espacio aéreo que lo circunda, para la defensa de los intereses marítimos de Chile. Junto con resguardar la soberanía nacional en los espacios marítimos, el Poder Naval permite el desarrollo seguro de sus intereses marítimos, que se manifiestan en las múltiples actividades productivas, deportivas y científicas que se desarrollan en la superficie del mar, bajo ésta y en la costa. El Estado de Chile, consciente del impacto de los intereses marítimos en el desarrollo nacional, ha configurado un Poder Naval acorde con su voluntad y visión marítima.
No menos importantes son los atributos del Poder Naval como instrumento de la política exterior del Estado, puesto que el derecho internacional permite a cualquier buque navegar cerca, e incluso transitar dentro, de las aguas territoriales de otros Estados, al tiempo que otorga a los buques de guerra un estatus de territorio nacional. La facilidad de los medios navales para desplazarse a grandes distancias y permanecer por el tiempo que sea necesario en zonas marítimas te interés nacional, permite al Estado manifestar su presencia e interés lejos de sus límites geográfico y llevar un mensaje de amistad o de advertencia, según se requiera, materializado en el pabellón nacional que el buque de guerra enarbola, así como en el poder militar que es capaz de proyectar.
5.1. Medios
La Fuerza Naval es el elemento más representativo del Poder Naval. La integran el conjunto de hombres, buques, submarinos, aviones, fuerzas de desembarco, defensa de costa y fuerzas especiales que la Armada opera, entrena y mantiene durante la paz para su empleo estratégico en caso de conflicto. El despliegue de las fuerzas, su grado de alistamiento operacional y organización, dependen de la situación político-estratégica que viva la nación y de la misión asignada a cada Mando en particular.
Para tales efectos, se desarrolla en forma permanente un programa de entrenamiento de diferente grado de complejidad, que va desde adquirir la capacidad para combatir como unidad independiente hasta lograr la capacidad de desarrollar operaciones conjuntas con participación de las otras instituciones de la Defensa Nacional y con armadas extranjeras. Con este propósito, las Fuerzas Navales se desplazan a lo largo y ancho del Océano Pacífico bajo permanente control y evaluación de los ejercicios desarrollados, a fin de incrementar su potencial operativo.
Los medios que conforman la Fuerza Naval son los siguientes:
5.1.1. La Escuadra Nacional
Es el componente más importante del Poder Naval chileno. Está conformada por los buques de primera línea, cuyas capacidades bélicas individuales complementan apropiadamente las de conjunto, de manera que sea capaz de enfrentar aceptablemente las tres amenazas imperantes en el medio ambiente de la guerra marítima: la aérea (aviones y misiles), la de superficie y la submarina. Esta potencialidad polivalente le permite desplazarse y enfrentar fuerzas adversarias similares, donde sea necesario, tanto en el ataque como en la defensa de las líneas de comunicaciones marítimas, que es la misión fundamental de la guerra en el mar. La Escuadra esta formada por las siguientes unidades:
* 2 Destructores líder portahelicópteros, de 6.500 tons.
* 9 Destructores líder misileros, de 6.500 tons.
* 2 Fragatas misileras, de 2.800 tons.
* 2 Fragatas antisubmarinas, de 2.800 tons.
* 2 Petroleros
* 1 Remolcador
* Escuadrón de Helicópteros HS-1
* Escuadrón de Exploración Aeromarítima
5.1.2. La Fuerza de Submarinos
El Submarino es un arma particularmente apta en el ataque a las líneas de comunicaciones. Su capacidad de desplazamiento sumergido le permite operar en aguas hostiles y persistir en el ataque por prolongado tiempo mediante la explotación de su principal ventaja: "la discreción". Adicionalmente, esta misma característica impone al enemigo un esfuerzo y desgaste enorme y desproporcionado para oponerse a sus operaciones. Sus principales medios son:
* 2 submarinos clase "Oberon"
* 2 submarinos clase U-209
* 1 buque madre de submarinos
La Base de Submarinos se encuentra ubicada en Talcahuano. El Comandante en Jefe de la Fuerza es un contraalmirante.
5.1.3. La Aviación Naval
Las características actuales de la guerra en el mar hacen imperativo mantener una meticulosa vigilancia en una extensa área alrededor de cualquier Fuerza Naval, a fin de detectar y neutralizar lo más anticipadamente posible toda amenaza. La Aviación Naval ejerce, por un lado, la vigilancia mas allá del horizonte de los radares y, por otro, provee una forma de acción en profundidad capaz de neutralizar las plataformas enemigas antes de que alcancen su distancia de lanzamiento.
Como Fuerza de Apoyo Operativo, la Aviación Naval tiene por misión proporcionar medios aeronavales organizados, equipados y entrenados para su empleo por las Fuerzas Navales. Las principales unidades de la Aviación Naval son el Destacamento de Helicópteros de Ataque de la Escuadra, la Fuerza Aeronaval de Viña del Mar y la Fuerza Aeronaval de Punta Arenas, que están integrados por Escuadrones con variado material de vuelo, para cumplir o satisfacer los requerimientos de los Mandos Operativos de la institución. La Aviación Naval está a cargo de un contraalmirante.
5.1.4. El cuerpo de Infantería de Marina (C.I.M.)
El Cuerpo de Infantería de Marina fue fundado por Decreto Supremo emitido por don Bernardo O'Higgins el 16 de junio de 1818. Las operaciones anfibias han tenido un papel destacado desde los inicios de nuestra historia independiente, habiendo iniciado sus actividades con la toma de los fuertes de Valdivia y de Corral en 1820.
La tarea fundamental de la Infantería de Marina es desembarcar y tomar por asalto una cabeza de playa, es decir, una porción de playa asegurada desde donde se puede iniciar una expedición tierra adentro. El Cuerpo de Infantería de Marina es una Fuerza de Apoyo Operativo, a cargo de un contraalmirante IM que desempeña el cargo de Comandante General. Las Unidades de Infantería de Marina son:
* Destacamento IM. Nº 1 "Lynch", en Iquique
* Destacamento IM. N° 2 "Miller", en Con-Cón.
* Destacamento IM. N° 3 "Aldea", en Talcahuano
* Destacamento IM. N° 4 "Cochrane", en Punta Arenas.
* Agrupación de Comandos IM. N° 51, en Viña del Mar.
5.1.5. La Fuerza de Acción Rápida
Esta fuerza naval está compuesta por buques de desembarco, unidades de transporte y buques de escolta, y lleva una fuerza de asalto anfibio de la Infantería de Marina. La movilidad y potencial ofensivo de esta fuerza es esencial para la maniobra estratégica de las Fuerzas Armadas y, por lo tanto, constituye una pieza fundamental de la estrategia disuasiva nacional.
El asalto anfibio es, quizá, la más compleja de las operaciones militares y requiere de la participación coordinada de fuerzas de aire, mar y tierra, por lo que habitualmente se desarrolla como un esfuerzo conjunto de las Fuerzas Armadas. Su ejecución exige especiales condiciones de entrenamiento y de una excepcional capacidad de planificación, coordinación y mando.
5.1.6. Las Fuerzas Especiales
Las Operaciones Especiales son operaciones bélicas, de acción directa o de reconocimiento sobre un objetivo, llevadas a cabo por fuerzas comparativamente pequeñas, que actúan fundamentalmente por sorpresa sobre objetivos de significación táctica o estratégica. Las Fuerzas Especiales de la Armada se conforman a partir de unidades de buzos tácticos y comandos de Infantería de Marina, previamente enarenados y equipados en sus unidades de origen.
5.2. Capacidades
El Poder Naval tiene capacidades que van más allá de su papel meramente militar, dada las características de versatilidad de sus buques para llevar a cabo tareas de carácter social, humanitarias, e incluso políticas, sumado a su alta movilidad y autonomía para desplazarse y permanecer por largos períodos en un área geográfica sin afectar la soberanía de otros países. En efecto, en general puede desempeñar tres grandes funciones:
5.2.1. Funciones diplomáticas
Considera aquellas áreas en que el Poder Naval puede contribuir a la política exterior del Estado. Estas áreas de misión son:
* Disuasión: Contribuir con sus capacidades a la disuasión que ofrece el Poder Nacional.
* Presencia naval: Mostrar la bandera de Chile en todos los mares que lo requiera el interés nacional.
* Manejo de crisis: Desplegar medios navales para expresar intenciones, según tipo, cantidad y proximidad de los buques al área de crisis.
5.2.2. Función militar
Es su función más importante y la que prioritariamente define sus capacidades y medios. Estas áreas de misión son:
* Control del mar: Controlar un área marítima de interés, por el lapso que sea necesario.
* Proyección del Poder Naval: Accionar sobre la costa adversaria, desde el mar.
* Defensa de costa: Proteger objetivos de importancia en el litoral propio.
5.2.3. Función socioeconómica
Comprende aquellas actividades de tiempo de paz que contribuyen a la seguridad y desarrollo. Estas misiones son:
* Seguridad: Proteger la vida humana en el mar y dar seguridad a la navegación.
* Vigilancia y control: Vigilar y controlar las aguas nacionales, los puertos y las playas, a través de la Autoridad Marítima.
* Desarrollo: Contribuir con sus medios al desarrollo socio-económico nacional.
Funciones del Poder Naval
6. CONTRIBUCIÓN AL DESARROLLO
En la Armada existe la más profunda convicción de que el futuro de Chile está en el mar. Por ende, sin perder de vista su misión fundamental, apoya todo tipo de actividad de los chilenos que tienda al aprovechamiento de las inagotables riquezas que el océano ofrece a nuestra nación. Para este efecto, y otros complementarios, desarrolla las siguientes labores:
* Patrullaje aeromarítimo y de superficie permanentemente en la Zona Económica Exclusiva, para mantener fuera de las 200 millas a pesqueros y buques-factorías de potencias extranjeras que concurren a pescar a esta área del Pacífico, sin autorización, atraídos precisamente por su riqueza ictiológica, a fin de preservarla para las industrias pesqueras nacionales.
* Control de contaminación del mar, destinado a prevenir el uso y costumbre de verter en el océano hidrocarburos y otros subproductos de pernicioso efecto en la vida marina.
* Operación y mantenimiento de una extensa red de faros, balizas y boyas para facilitar la navegación a lo largo de los canales y el resto del litoral de la nación, para naves de todas las marinas del mundo. Particular mención merecen los patrulleros y escampavías de la Tercera y Segunda Zonas Navales, cuyas tripulaciones muchas veces arriesgan la vida para mantener encendidos faros en posiciones de muy difícil acceso.
* Labor hidrográfica en la región de los canales desde Chiloé a la Antártida, desarrollada permanentemente por unidades de la Tercera y Segunda Zonas Navales, para brindar seguridad a la navegación comercial y abrir nuevas rutas más económicas.
* Servicio Meteorológico Marítimo para todas las naves que circulan en el mar de Chile.
* Red Marítima de Telecomunicaciones costeras, para el servicio de la Marina Mercante y naves pesqueras, que considera adicionalmente un servicio médico a distancia en caso de emergencias graves que impliquen la actuación de lejos para salvar la vida a un tripulante enfermo.
* Apoyo Médico-Dental y abastecimiento de pobladores de zonas apartadas, donde cabe hacer una mención especial de la labor desarrollada por la lancha médico-dental "Cirujano Videla", que anualmente presta más de 22.000 atenciones de salud en población de Chiloé y Aysén.
* Apoyo a zonas aisladas. Cabe destacar la acción de los buques de la Tercera Zona Naval que desarrollan una significativa labor entre los pobladores del canal y del río Baker.
* Por último, es común encontrar en los pequeños puertos del litoral numerosas escuelas pintadas de plomo, porque en sus viajes de entrenamiento cada buque de la Armada apadrina a una o más escuelas en los lugares apartados donde recala y les brinda todo el apoyo posible en reparaciones de carpintería, gasfitería, electricidad y pintura.
CAPÍTULO IV: FUERZA AÉREA DE CHILE
Cómo ocurre en la mayor parte de los países, la Fuerza Aérea es la más nueva de las instituciones castrenses chilenas. Como tal, la Fuerza Aérea de Chile nació cuando nuestro país llevaba ya más de cien años de vida independiente. Sin embargo, Chile destaca en el desarrollo de la aviación mundial desde comienzos del siglo XX, gracias a la contribución de un puñado de pioneros nacionales y precursores de la FACH. Las páginas que siguen dan cuenta de la actual misión de la Fuerza Aérea, de la formación de su personal, su orgánica, sus capacidades y su contribución al desarrollo del país.
1. RESEÑA HISTÓRICA
Como ha sido norma en prácticamente todos los países, la Fuerza Aérea de Chile se creó en 1930 a partir de la fusión de los Servicios Aéreos del Ejército y de la Armada. De esta manera, se quiso establecer, en aquel entonces, una correspondencia entre el medio en que las instituciones castrenses operaban y el arma apropiada para cada una: tierra, mar y aire; Ejército, Armada y Fuerza Aérea. A este argumento se sumó la apreciación, común en la época, en cuanto a la conveniencia de que todo lo concerniente al mando, control y operaciones de los medios aéreos con fines militares estuviera concentrado en un arma específica y autónoma, con doctrinas, equipamiento, instrucción y entrenamiento especial para dicho propósito.
Hay un deber de gratitud hacia quienes, tan pronto conocieron el fenómeno de la aviación, que estaba empezando a florecer en tierras muy lejanas, tuvieron la visión y la decisión para traerlo al país y ponerlo al servicio de su progreso. Destacan los nombres del General Arístides Pinto Concha, gran impulsor de esta empresa, y el del entonces teniente coronel Pedro Pablo Dartnell, autor del informe que fue decisivo para empezar la Aviación Militar en el Ejército, a la cual seguiría a corto plazo la de la Armada.
De esa época de los precursores destacan los nombres de los capitanes Manuel Ávalos y Diego Aracena, los tenientes Dagoberto Godoy y Armando Cortínez, así como de los numerosos mártires que entregaron su vida por la consolidación de este ideal aéreo.
Dagoberto Godoy inscribe su nombre en las páginas de oro de la aviación mundial al cruzar por primera vez la cordillera de los Andes el 12 de Diciembre de 1918, a 17.300 pies, llevando un saludo del pueblo de Chile al pueblo Argentino. El año siguiente, el teniente Armando Cortínez Mujica realiza el primer viaje de ida y vuelta sobre la Cordillera de los Andes. Más tarde, en 1922 y con motivo del Centenario de la República del Brasil, el capitán Diego Aracena Aguilar lleva un saludo del Presidente de Chile, que es entregado en su destino después de recorrer casi 4.000 kilómetros, cubiertos en 36 horas de vuelo y casi un mes de viaje, constituyendo uno de los raids más largos y exitosos de la época.
En 1930, las enormes posibilidades que ofrecía el medio aéreo para unir rápidamente el territorio nacional y los éxitos de la aviación en el mundo, deciden al entonces Presidente de la República, General Carlos Ibáñez del Campo, a crear la Fuerza Aérea mediante Decreto Supremo 1.167, del 21 de Marzo de ese año. Para ello, resuelve unificar los servicios aéreos del Ejército y de la Armada, y hacerlos depender de una Subsecretaría de Aviación, que pasó a llamarse Fuerza Aérea Nacional y, posteriormente, Fuerza Aérea de Chile.
El comodoro Arturo Merino Benítez fue su gran impulsor, a fines de la década de los 20. No sólo luchó por la creación de una Fuerza Aérea independiente, sino también por la de una aviación comercial, civil y deportiva, una industria aeronáutica y el desarrollo de la infraestructura necesaria para operar a lo largo del país, concibiéndolas como partes de un todo. A este concepto hoy lo conocemos como "sistema aeroespacial".
Quien consolidó a la Fuerza Aérea de Chile fue el general del Aire Diego Aracena Aguilar. Nombrado Comandante en Jefe en 1932, él la dotó, en sus seis años de mando, de una estructura orgánica capaz de cumplir las tareas que le asigna la defensa del país al Poder Aéreo.
A partir de este esquema de funcionamiento, la Fuerza Aérea orientó sus esfuerzos a unir al país mediante rutas aéreas, de manera de llegar con un mensaje de chilenidad a los más apartados rincones de nuestro territorio continental, insular y antártico, en forma rápida y segura.
Las indudables ventajas del medio aéreo para enlazar rápidamente nuestro territorio permitieron inscribir como una hazaña institucional el histórico vuelo del capitán Roberto Parragué a Isla de Pascua, en 1951. Lo hizo en el avión Catalina 405 "Manu-Tara", con un tiempo de vuelo de 19 horas y 22 minutos, abriendo así las rutas aéreas chilenas hacia Oceanía, las que hoy son de uso cotidiano.
En 1947, la ruta a la Antártica tuvo su inicio en el primer vuelo de un avión Vought Sikorsky de la Fuerza Aérea de Chile, al mando del teniente I Arturo Parodi Alister. Ocho años después, en 1955, se efectuó el primer vuelo de ida y regreso desde el continente hacia el territorio antártico en el Catalina 406 "Skua", al mando del comandante de Escuadrilla Humberto Tenorio Iturra.
También se inscriben como hitos importantes la construcción de una pista de aterrizaje en la base Presidente Eduardo Frei Montalva, en la isla Rey Jorge, y la instalación en ella del Grupo de Exploración Antártica N 19. Esta posición ha demostrado tener un valor fundamental para la penetración aérea chilena en el continente antártico, la que hoy alcanza hasta el mismo Polo Sur, donde se arribó por primera vez el 30 de Noviembre de 1984 con dos aviones Twin Otter, en la operación conocida como "Estrella Polar". A partir de ese momento se continuó la exploración de la Antártica, destacando el vuelo transpolar que permitió que aeronaves y tripulaciones institucionales llegaran hasta la base de McMurdo, en octubre de 1996.
Chile está unido totalmente por el aire y su Fuerza Aérea puede operar en cualquier latitud de su terrirorio, sea en el árido desierto nortino, los campos de hielo australes, el macizo andino, las soledades antárticas, sobre el océano Pacífico o en nuestros territorios insulares.
2. MISIÓN
Defender a la República de Chile por medio del control y explotación del espacio aéreo, participar en la batalla de superficie y apoyar fuerzas propias y amigas, con el propósito de contribuir a los objetivos estratégicos que la política nacional le fija a las Fuerzas Armadas.
Para cumplir con su misión, la Fuerza Aérea desarrolla las siguientes funciones específicas:
2.1. En tiempo de guerra
* Realizar operaciones destinadas a destruir o neutralizas fuerzas aéreas, terrestres y navales adversarias. El Poder Aéreo es un instrumento dotado de una gran capacidad de destrucción, particularmente por las posibilidades de enfrentar a las fuerzas adversarias prácticamente en cualquier lugar, sin importar distancias u obstáculos geográficos.
* Dirigir y coordinar la defensa aérea del país. La Fuerza Aérea ejerce el control del espacio aéreo nacional a través de sus medios orgánicos y los de la Dirección General de Aeronáutica Civil (D.G.A.C.). Esta compleja tarea se hace mediante un proceso de vigilancia del espacio aéreo y una positiva identificación del tráfico militar, civil, comercial y deportivo. En el caso de trararse de incursiones no identificadas, ilícitas u hostiles, se reacciona mediante la interceptación de las aeronaves, permitiendo de esta manera responder gradualmente, hasta el empleo de la fuerza, si las circunstancias así lo demandan.
* Lograr un grado de control del aire que permita desarrollar operaciones a las fuerzas propias y amigas. El mejor aporte que puede hacer la Fuerza Aérea es lograr el control del aire. El control del aire es la capacidad que viene el Poder Aéreo para ejercer una voluntad propia en un espacio determinado por un tiempo y área geográfica definida. El control del aire permite que las fuerzas propias y amigas no sean destruidas desde el aire; de esta manera, los comandantes terrestres y navales pueden desarrollar sus propias acciones sin interferencias prohibitivas por parte del poder aéreo adversario.
* Apoyar las operaciones de las fuerzas de superficie necesarias para contribuir al esfuerzo bélico del país. El apoyo aéreo, en sus diferentes formas, ha sido a través de la historia una capacidad que le ha facilitado a las fuerzas de superficie la tarea de neutralizar o destruir medios adversarios, siendo un factor crítico para la victoria. Disponer de apoyo aéreo permite lograr los objetivos en forma más rápida y eficiente, disminuyendo el costo de vidas y de recursos materiales para las fuerzas propias y amigas.
* Realizar el reconocimiento aéreo -estratégico y el transporte aéreo miilitar. Las capacidades del Poder Aéreo en lo que se refiere a altura, alcance, velocidad y penetración, lo convierten en un arma especialmente eficaz para observar el accionar del adversario, aportando una valiosa información a los distintos niveles de la conducción de la guerra. En cuanto al transporte aéreo militar, es el que permite un rápido desplazamiento de fuerzas a grandes distancias, haciendo eventualmente posible el cambio de centros de gravedad de las operaciones, según los requerimientos superiores.
2.2. En tiempo de paz
* Ejercer la vigilancia y el control positivo del espacio aéreo nacional. En conjunto con la D.G.A.C., se ejerce el control de tráfico aéreo para que la actividad aérea se realice en forma segura y poder reaccionar ante incursiones ilícitas en el espacio aéreo nacional.
* Contribuir al desarrollo del poderío aeroespacial. La Fuerza Aérea hace esfuerzos por contribuir a destacar la importancia de la tercera dimensión como un medio a través del cual la humanidad puede alcanzar un mayor desarrollo. En la medida en que los ciudadanos perciban la importancia del aeroespacio, la tarea de la Fuerza Aérea será mejor comprendida, pues habrá un cabal entendimiento de las múltiples formas en que puede contribuir a la seguridad y bienestar de la población.
* Dirigir y controlar las operaciones que ejecute el Servicio de Búsqueda y Salvamento Aéreo (S.A.R). Al estar, en conjunto con la D.G.A.C., involucrada en el control del tráfico aéreo para la seguridad de la actividad aérea, la Fuerza Aérea cuenta con los medios para reaccionar ante catástrofes y siniestros producidos por accidentes de aviación. Esta capacidad de rescate es frecuentemente utilizada en las emergencias que enfrenta el país a causa de desastres naturales.
* Ejercer, por medio del Servicio Aerofotogramétrico (S.A.F), las funciones y atribuciones que le corresponden en materias de aerofotogrametría, cartografía y afines. Contar con una capacidad para observar la tierra desde el espacio, da a los planificadores de todos los niveles del quehacer nacional una visión que les permite el óptimo empleo de los recursos. La fotografía aérea es una eficaz ayuda para el desarrollo de cartografía, planificación urbana, prospección agrícola, minera y de recursos naturales en general, ayudando a quienes deban tomar decisiones en proyectos de inversión.
* Promover el fomento de los Intereses Aeroespaciales. En la medida en que el país internalice en forma más completa el concepto de aeroespacio, se estará fomentando el desarrollo de la nación a través del uso de esta invención del hombre.
3. ORGÁNICA
3.1. Mando Superior
El Mando Superior es ejercido por el comandante en Jefe de la Fuerza Aérea, quien tiene la responsabilidad de la conducción estratégica y gestión administrativa de la instrucción. Es asesorado por el Estado Mayor General en materias estratégicas, operativas y de gestión, planificando, coordinando y controlando el quehacer institucional.
El Estado Mayor General está conformado por las siguientes Direcciones:
* Dirección de Operaciones,
* Dirección de Inteligencia,
* Dirección de Defensa Antiaérea y Telecomunicaciones,
* Dirección de Ingeniería,
* Dirección de Finanzas, y
* Dirección de Sanidad.
3.2. Unidades de Apoyo
3.2.1. Comando Logístico
La Misión del Comando Logístico es obtener, proveer, mantener y desarrollar los recursos materiales, tecnológicos y de información logística para satisfacer las necesidades derivadas de la planificación institucional.
3.2.2. Comando del Personal
La Misión del Comando de Personal es obtener y proporcionar en calidad y cantidad el potencial humano que requiere la Fuerza Aérea para cumplir sus tareas, y proporcionar al personal y su núcleo familiar la atención
Médica y servicios de bienestar social, con el propósito de mejorar su calidad de vida.
3.2.3. Comando de Educación
La misión del Comando de Educación es planificar, coordinar y controlar el proceso educacional, con el propósito de obtener, en este ámbito, un desarrollo integral del potencial humano requerido por la institución.
3.3. Unidades Operativas
Las unidades operativas de la Fuerza Aérea están representadas por cinco Brigadas Aéreas, cuyas jurisdicciones cubren la totalidad del territorio nacional.
Las Brigadas Aéreas son unidades operativas que ejercen mando dentro de un área geográfica y que tienen por misión conducir las operaciones aéreas de los medios a su disposición en sus zonas jurisdiccionales. Al mando de cada una de ellas hay un Oficial General que depende directamente del Comandante en Jefe. Cada Brigada cuenta con Grupos de Aviación dotados de material aéreo de diverso tipo, que realizan las operaciones aéreas de combate y de apoyo de combate en cumplimiento de la planificación y directivas institucionales.
La Primera Brigada Aérea, con asiento en Iquique, tiene como área jurisdiccional la I Región; la Quinta Brigada Aérea, con asiento en Antofagasta, cubre las regiones II y III; la Segunda Brigada Aérea, en Santiago, cubre desde la IV Región hasta la VIII Región del país, incluyendo el la zona metropolitana; la Tercera Brigada Aérea, con asiento en Puerto Mont, cubre el sector sur e incluye las regiones IX, X y parte de la XI; la Cuarta Brigada Aérea, con asiento en Punta Arenas, cubre el sector austral, incluyendo parte de la Región XI y la Región XII.
3.4. Organizaciones Complementarias al Poderío Aeroespacial
3.4.1. Dirección General Aeronáutica Civil (D.G.A.C.)
La D.G.A.C. es un organismo público del Estado que depende directamente del Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea. Su misión consiste en proporcionar ayuda y protección a la navegación aérea dentro de un espacio aérea que, en su eje vertical. Llega hasta el polo sur y, en su eje horizontal, se interna frente a nuestras costas a más de 5.000 kilómetros en la profundidad del Océano Pacífico, hasta el meridiano 131 Oeste.
Los vuelos lícitos que se realizan dentro de este inmenso espacio aéreo son controlados y apoyados por la D.G.A.C. Ante la eventualidad de vuelos ilícitos dentro del espacio aéreo controlado y, en particular, dentro del espacio aéreo soberano, la D.G.A.C. y la Fuerza Aérea actúan coordinadamente para su identificación y control. Para ello, se ciñen a las normas del Reglamento del Aire y a los principios del artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, sobre la solución de conflictos internacionales. Idéntica coordinación rige para las actividades de búsqueda y salvamento; un ejemplo de esto es el empleo mutuo de la red mundial de satélites COSPAS-SARSAT. En relación con estas tecnologías satelitales, la D.G.A.C. está a la vanguardia en la región, gracias al desarrollo de programas tendientes a incorporar los nuevos conceptos de navegación y control de tráfico aéreo por medio de satélites, lo que permitirá a las aeronaves que sobrevuelen nuestro espacio hacerlo en forma, rápida, eficiente y segura.
La velocidad de los aviones y los escasos márgenes de tiempo para la toma de decisiones, obligan a una coordinación extrema de los profesionales de la D.G.A.C. con los de la Fuerza Aérea, situación que se ve favorecida por la dependencia de ambas instituciones de un solo titular: el Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea.
3.4.2. Empresa Nacional Aeronáutica (ENAER)
ENAER es una empresa autónoma del Estado cuyo directorio está presidido por el Comandante en jefe de la Fuerza Aérea. Su calidad profesional es internacionalmente reconocida en materia de fabricación, reparación y modificaciones de aviones, piezas y partes aeronáuticas.
En cuanto a fabricación, es distintivo el avión de instrucción básica Pillán, que se encuentra en plena operación en varias fuerzas aéreas del mundo. En la elaboración de piezas y partes destacar, las coproducciones llevadas a cabo con empresas de distintos países de reconocido prestigio en el mundo aeronáutico.
En lo referido a modificaciones se debe subrayar la incorporación de tecnología de última generación en aviones de combate de acuerdo a los requerimientos planteados por la Fuerza Aérea de Chile. Actualmente, su capacidad instalada le permite desarrollar el mantenimiento de depósito del material aéreo de la institución y de aeronaves militares y civiles de otros países.
Orgánica de la Fuerza Aérea
4. PROCESO FORMATIVO
Los Oficiales comienzan su formación en la Escuela de Aviación y el personal del Cuadro Permanente lo hace en la Escuela de Especialidades. De esta forma, la institución asegura una formación de base homogénea que incorpora en sus nuevos miembros la disciplina. Los valores y los fundamentos éticos de la Profesión Militar.
4.1. Formación de los Oficiales
El ingreso a la Escuela de Aviación se hace con tercer año de enseñanza media cumplida y comprende una etapa de formación integral de cuatro años, período durante el cual los jóvenes son separados en cuatro escalafones diferentes: Rama del Aire, Ingeniería Aeronáutica, Ingeniería en Administración e Ingeniería de Ejecución en Defensa Aérea; esta última tiene dos menciones: Comunicaciones y Electrónica, y Artillería Antiaérea.
Al cabo de cuatro años de estudios, los cadetes egresan con el grado de Alférez y son enviados a continuar su formación profesional a la Academia Politécnica Aeronáutica, en el caso de los oficiales terrestres, y a la Escuela Táctica, con asiento en Iquique, los oficiales de la Rama del Aire.
Los oficiales de los escalafones terrestres cursan en la Academia Politécnica estudios con diferentes tiempos de duración. Los ingenieros aeronáuticos permanecen cuatro años; los ingenieros en administración, tres años; y los ingenieros de ejecución en defensa aérea lo hacen durante dos años.
Al cabo de este período, y tras haber aprobado sus tesis profesionales, reciben los títulos respectivos y son destinados a las unidades que la Fuerza Aérea tiene a lo largo del país.
Los oficiales de la Rama del Aire realizan en la Escuela Táctica la etapa de vuelo avanzado en material a reacción y, posteriormente, son seleccionados para especializarse como pilotos de combate, transporte o helicópteros. Al aprobar estos cursos obtienen el título de Piloto de Guerra.
El cuerpo de oficiales de la institución continúa su perfeccionamiento a lo largo de su carrera, realizando distintos cursos de capacitación. Estos cursos se realizan en institutos superiores institucionales, extra-institucionales o en universidades, tanto chilenas como extranjeras.
En la Academia de Guerra Aérea se realiza el Curso de Informaciones en el grado de Capitán. Durante un período de seis meses se capacita al alumno para la asesoría en la conducción táctica de las Unidades. En el grado de Comandante de Escuadrilla y Comandante de Grupo, los oficiales deben realizar el curso de Estado Mayor, que los capacita para desempeñarse como asesores de Estado Mayor en los niveles de conducción operativo y estratégico, así como para el mando de unidades. En el grado de Coronel, continúan su perfeccionamiento en la Academia de Guerra Aérea o en la Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos, donde realizan un curso de Administración Superior o de Alto Mando, respectivamente.
4.2. Formación de personal del Cuadro Permanente
El personal del Cuadro Permanente de la institución está dividido en dos áreas específicas: el personal de línea y el personal de los servicios. El personal de línea ingresa a la Fuerza Aérea de Chile mediante el proceso de postulación y selección de la Escuela de Especialidades. El personal de los servicios se conforma con personas que han realizado el Curso Aéreo-militar Básico en la Escuela de Especialidades y que poseen una especialidad previamente adquirida.
4.2.1. Personal de Línea
El ingreso a la Escuela de Especialidades se realiza con cuarto año de enseñanza media cumplida. Los estudios comprenden una etapa de formación integral de dos años, al término de la cual se egresa como Cabo de la Fuerza Aérea, capacitado para iniciar la preparación práctica en las unidades de la institución. Durante sus estudios, los alumnos son separados en cinco áreas específicas de especialización: Defensa Aérea, Mantenimiento y Armamento, Comunicaciones y Electrónica, Apoyo a las Operaciones Aéreas y Área Administrativa
Una vez destinados a las diferentes unidades, los cabos ingresan a un proceso de adiestramiento en el trabajo (A.E.T.) en las diferentes áreas de especialización. Posteriormente, continúan con un programa de entrenamiento en el trabajo (E.E.T.), cuyo propósito es que alcancen un mejor nivel de eficiencia teórico-práctico en su especialidad, recibiendo el título de Técnico de Nivel Superior que, además, es requisito educacional de ascenso al grado de Sargento. Este perfeccionamiento continuo es controlado por la Escuela de Perfeccionamiento de Suboficiales (E.P.S.)
Una vez en posesión del grado de Sargento 2º, el personal realiza en la Escuela de Perfeccionamiento de Suboficiales el curso de Supervisión. Este curso, además de entregar las herramientas para desempeñarse como supervisor en la especialidad, confiere el máximo nivel de eficiencia teórico-práctico y es requisito educacional para ascender al grado de Suboficial.
Finalmente, realizan en la E.P.S. el curso de Suboficial Mayor aquellos que, por su calidad profesional, han obtenido la calificación para ascender a este grado. Aprobado este curso, y previa autorización de la Junta Especial de Selección, ascienden al grado de Suboficial Mayor.
4.2.2. Personal de los servicios
Para ingresar a la Fuerza Aérea en este escalafón es necesario aprobar en la Escuela de Especialidades un curso denominado Aeromilitar Básico, al término del cual egresan como cabos. Durante su carrera, son sometidos al mismo proceso de E.E.T. del personal de línea para obtener los diferentes niveles de eficiencia que requiere la Fuerza Aérea.
5. CAPACIDADES Y MEDIOS
La Fuerza Aérea de Chile representa el Poder Aéreo Nacional. Esto significa que debe ser capaz de influir desde el aire para lograr una decisión. Para este fin, posee características que le son propias. Destacan, entre ellas, la movilidad, que le permite desplazarse rápidamente hacia teatros distantes para proporcionar apoyo oportuno a las fuerzas propias o amigas, o para actuar como agente disuasivo frente a una situación de crisis o agresión; la flexibilidad, que le permite llevar a cabo una variedad de acciones y producir una gran gama de efectos, adaptándose con relativa facilidad a circunstancias y situaciones cambiantes; la altura, velocidad y alcance, que le permiten proyectar el poder militar, con rapidez, a grandes distancias, y sin los impedimentos impuestos por las características geográficas, haciendo posible contar con una capacidad de respuesta rápida. Este concepto requiere un cuidadoso balance de capacidades y medios, de los cuales dependerá la efectividad y eficiencia en el empleo del medio aéreo.
En efecto, la suma de aviones de combate ofensivos y defensivos, que es la principal fuerza con que cuenta la institución, debe acompañarse de una capacidad de transporte, una capacidad para poder mandar y controlar las operaciones, una capacidad para poder oponerse a ataques del enemigo -la que incluye medios de detección y de defensa antiaérea- y una infraestructura capaz de soportar castigo y, ante condiciones adversas, ser capaz de continuar cumpliendo las operaciones.
Dentro de su estructura orgánica, la Fuerza Aérea incorpora de manera equilibrada todas estas capacidades, distribuyéndolas en las Brigadas Aéreas a lo largo de todo el territorio nacional, asegurando con ello el cumplimiento eficiente de la misión que le ha sido encomendada. Su principal material de combate está constituido por aviones que cumplen roles ofensivos y defensivos, los cuales conforman la columna vertebral de la institución, cumpliendo eficientemente las tareas que les asigna la planificación. Estos sistemas de armas se ven potenciados con una capacidad de reabastecimiento en vuelo y una capacidad de alarma temprana aerotransportada, que son consideradas como multiplicadores de fuerza.
Se suman a estas capacidades el material de transporte pesado y liviano, con aeronaves capaces de cumplir con el transporte de carga y de pasajeros en condiciones de paz, crisis y guerra. La capacidad de transporte y rescate se ve complementada por helicópteros aptos para operar en distintos tipos de configuraciones geográficas.
Para el empleo eficiente de sus recursos materiales, la Fuerza Aérea cuenta, además, con bases aéreas, unidades de defensa antiaérea y unidades de detección en las distintas Brigadas, todo ello coordinado a través de un sistema de mando y control automatizado, que permite el eficiente manejo del flujo de información para d desarrollo de las operaciones.
A las capacidades operativas descritas, se suman las provistas por una sólida aviación comercial apoyada en una infraestructura aeronáutica compuesta de terminales aéreos para carga y pasajeros, sistemas de radares y equipos de ayuda a la navegación aérea. Estas capacidades han permitido un desarrollo sostenido en términos de aumento de traslado de pasajeros y carga, con altos índices de seguridad, haciendo de Chile uno de los países más seguros para la realización de operaciones aéreas en América Latina.
Junto a ello, cabe destacar a la aviación civil y deportiva, a través de la cual, año a año, se forman nuevos contingentes de pilotos con una clara coincidencia aeronáutica. Esto permite al país contar con un recurso humano de reserva altamente preparado para actuar desde el aire, cuando sea requerido, en apoyo a la comunidad.
Todas las anteriores capacidades humanas y materiales conforman un sistema, denominado Poderío Aeroespacial. Es este sistema, cuya componente de fuerza es la Fuerza Aérea, el que permite al país contar, durante la paz, con un elemento esencial para la disuasión, así como, en tiempos de crisis, disponer de una herramienta eficaz para respaldar las divisiones del gobierno. Sin llegar a un conflicto armado. En caso de que así fuera, el país cuenta con un elemento decisivo para ser empleado de acuerdo a los superiores intereses nacionales.
6. CONTRIBUCIÓN AL DESARROLLO
6.1. Ámbito nacional
La Fuerza Aérea participa activamente en la integración al resto del territorio de las zonas aisladas, contribuyendo a su desarrollo en todo el ámbito continental, insular y antártico chileno. Esta tarea es de incalculable valor puesto que ayuda a reforzar el sentido de nacionalidad y pertenencia a nuestra partia.
Es por ello que sus aviones de transporte, cuyo propósito operativo es apoyar el despliegue estratégico de los medios de combate, durante la paz desarrollan actividades de apoyo a la comunidad uniendo zonas aisladas y brindando el apoyo material y anímico a nuestros compatriotas, a fin de ayudarles a obtener una mejor calidad de vida y una mayor integración al resto del país. Este apoyo, que se materializa en rondas médicas, evacuación de heridos, transporte de pobladores y abastecimiento de equipos, herramientas y provisiones, adquiere particular relevancia en el caso de las regiones X y XI, donde su hostil geografía limita el accionar de pequeñas comunidades en su acceso a salud, educación y suministros.
Se debe destacar también el papel que juega la Fuerza Aérea en las frecuentes catástrofes naturales que afectan al país y en donde la institución proporciona apoyo con sus medios, principalmente, en las áreas de salud, rescate, evacuación de heridos y transporte de material y equipos.
Dentro del ámbito de actividades de contribución al desarrollo, es de gran importancia resaltar el servicio prestado por el Servicio Aéreo Fotogramétrico (S.A.F.) para la planificación y desarrollo de infraestructuras viales, catastros de bosque nativo, determinación de zonas aptas para el poblamiento y producción de distintas especies agrícolas, prospecciones mineras, diagnósticos ambientales. Todas estas actividades apuntan a potenciar el desarrollo nacional mediante el empleo de modernas técnicas de fotografía aérea.
En este mismo orden de ideas, la Fuerza Aérea está dando los primeros pasos para un desarrollo espacial que, inexorablemente, Chile tendrá que emprender como parte de su modernización. En este sentido, la Fuerza Aérea continuará poniendo a disposición de la comunidad nacional su tecnología aeronáutica y espacial, para producir información que ayude a optimizar las decisiones económicas bajo el marco de protección del medio ambiente que el país demanda(87).
6.2. Ámbito internacional
La Fuerza Aérea colabora en el esfuerzo nacional para proyectar a Chile en el ámbito mundial a través de su participación en operaciones de mantenimiento de la paz auspiciadas por las Naciones Unidas(88). También participa en las rondas de conversaciones entre los Altos Mandos de las Fuerzas Armadas de Chile y Perú, y de Chile y Argentina(89). En este mismo orden de ideas, mantiene contactos permanentes en ámbitos relacionados con la ciencia y la tecnología con instituciones de distintos países del mundo en diversas áreas de interés nacional.
Desde 1980, la Fuerza Aérea organiza la Feria Internacional de Aire y del Espacio (FIDAE), cuyo prestigio ha alcanzado un renombre internacional al ser considerada entre las cuatro ferias aeronáuticas más importante del mundo y el principal evento de su tipo en Latinoamérica Contribuye, asimismo, a la imagen internacional de Chile por intermedio de la escuadrilla de Alta Acrobacia "Halcones", reconocida como uno de los mejores equipos de acrobacias del mundo, en sus actuaciones en Europa, Estados Unidos y Latinoamérica.
(80) Constitución Política de la República (CPR), art. 91.
(81) CPR, art. 90, y Ley Orgánica Constitucional (LOC) de las Fuerzas Armadas, art. 1, de 1990.
(82) Lo que se refiere al Servicio Militar Obligatorio se aborda en la Parte III, capítulo V, acápite 2.
(83) Ver acápite 6 infra: "Contribución al desarrollo".
(84) Ver Parte II, capítulo I, acápite 3; "Sistema mundial y Estado: las Naciones Unidas y Chile".
(85) D.S. Nº 375, del 28 de diciembre de 1978.
(86) De estos mandos se habla más adelante, en el párrafo dedicado al Poder Nacional.
(87) Ver Parte IV, capítulo III: "Desafíos geográficos".
(88) Ver Parte II, capítulo I, acápite 3: "Sistema mundial y Estado: las Naciones Unidas y Chile".
(89) Ver Parte II, capítulo II, acápite 3.2.: "Medidas de Confianza Mutua".
ACTIVIDADES CONJUNTAS: Secuencia de tareas en tiempo y/o espacio, en demanda de un objetivo específico, cuyo logro requiere la participación activa e integrada, bajo un mando único, de medios humanos y materiales del Ejército, Armada y Fuerza Aérea, o de al menos dos de estas Instituciones.
ACTIVIDADES COMUNES: Conjunto de tareas que contribuyen a un mismo objetivo final y pueden o deben ser realizadas individualmente por el Ejército, la Armada o la Fuerza Aérea, sin perjuicio de las coordinaciones que correspondan.
ACTIVIDADES ESPECÍFICAS: Tareas que en forma propia y exclusiva corresponde realizar a cada una de las ramas de las FF.AA.
DOCTRINA: Norma de carácter general, de cierta permanencia en el tiempo, que orienta el proceso de toma de decisiones, según un criterio superior. Permite enfrentar situaciones comunes, o imprevistas, sin que medien instrucciones específicas.
INTELIGENCIA: Información útil y oportuna sobre alguna situación específica. Normalmente, es producto de un proceso que comprende la recolección, evaluación, análisis, integración e interpretación de informaciones varias. Este proceso se denomina "ciclo de Inteligencia" y el Ejército forma oficiales y suboficiales en esta especialidad.
ESTRATEGIA: Ciencia y arte que aplica el conductor militar de alto nivel en la concepción y conducción de los medios puestos a su disposición, para la consecución de objetivos que contribuyen al triunfo de la guerra. El término se ha hecho extensivo al empleo eficaz de medios en el logro de objetivos, sean militares o no. La estrategia militar está incorporada como asignatura en la formación de los oficiales.