Título: Argentina. La Defensa Nacional en la Agenda Democrática. Informe de la primera ronda de discusiones - Dictamen de Mesa 1: Política Exterior y Defensa Nacional

DICTAMEN DE MESA 1: POLÍTICA EXTERIOR Y DEFENSA NACIONAL
1. Consideraciones previas
Los temas tratados en esta mesa, exceden el marco propio de la defensa, pero deben ser necesariamente analizados, en la medida en que se requiere establecer un marco general de referencia que incluye, entre otros asuntos, los principios generales de la política exterior del Estado. Ello permitirá luego, un adecuado tratamiento de los principios de la política de defensa, que son el objeto central de esta iniciativa.
En el mundo de hoy -obviamente también en la Argentina- se reconoce la estrecha relación que existe entre las problemáticas de las relaciones exteriores y de la defensa. En nuestro caso es posible sostener que la Política Nacional de Defensa es necesariamente un componente activo de la Política Exterior nacional.
A la concreción de la Política Exterior de nuestro país concurren actualmente varios actores del Estado. Es aconsejable que éstos actúen de un modo coordinado con la Cancillería, a los efectos de optimizar los logros en la materia. Ello contribuirá activamente a promover y proteger los intereses vitales y estratégicos de nuestro país.
2. Intereses Vitales y Estratégicos
Los Intereses Vitales son aquellos que el Estado Nacional identifica como de carácter permanente, sin que ello implique inmutabilidad de los mismos a través del tiempo y que encuentran un marco de referencia explícito en la Constitución Nacional y su Preámbulo. Son además aquellos intereses que, al ser vulnerados, ponen en serio riesgo la propia continuidad de la Nación y de su Estado.
Los Intereses Estratégicos, en cambio, son aquellos que en su consecución, viabilizan a los Intereses Vitales. Deben ser redefinidos periódicamente, en concordancia con los cambios que se operen en el modelo de desarrollo nacional, de inserción externa del país y conforme al contexto externo e histórico que los enmarca.
Dicha actualización debe ser realizada por los representantes del pueblo legítimamente constituidos, ya que son ellos quienes tienen la representatividad legal y legítima para hacerlo.
El libro Blanco de la Defensa Nacional, El decreto de Planeamiento Estratégico 1116/96 y la Revisión de la defensa 2001, hacen un buen relevamiento de ambos tipos de intereses.
Al ser la seguridad jurídica un fundamento del Estado y estando aquella constituida, tanto por el marco legal vigente como por las herramientas establecidas para su aplicación y control, es importante partir de los conceptos vertidos en la propia Constitución Nacional, y en el conjunto de leyes dictadas para el sector, a saber:
- La Ley de Defensa Nacional
- La Ley de Seguridad Interior
- La Ley de Reestructuración de las FFAA
- La Ley de Inteligencia Nacional
Es necesario que el Estado promueva y proteja, de modo permanente, tanto los Intereses Vitales como Estratégicos, desplegando para ello los medios políticos, económicos, tecnológicos, educativos, culturales y militares.
Es asimismo menester que el presente debate contribuya a definir el nuevo listado de ambos tipos de intereses de la Nación. Del mismo modo, para una adecuada actualización de los Intereses Vitales y Estratégicos nacionales deberá producirse un aporte substantivo, no solo del área de Defensa, sino de otras áreas del Estado Nacional.
Intereses Vitales
La definición de los intereses vitales motiva las consideraciones siguientes:
- El reconocimiento de los intereses vitales implica la admisión previa de que la Nación es una sola e indivisible.
- La identificación de este tipo de intereses supone ubicarse en un alto nivel de abstracción. En cualquier caso se debe tratar de evitar los extremos; tanto una formulación tan amplia o vaga que los torne -de hecho- inalcanzables, cuanto una formulación tan concreta que terminen siendo confundidos con el nivel de lo operacionalizable, que caracteriza a las políticas públicas de estado o de gobierno.
- Contribuye a la identificación de los Intereses Vitales, además de su permanencia en el tiempo y su alto nivel de abstracción, la necesidad de que éstos cuenten con un consenso mayoritario que los respalde.
- Es necesario distinguir no sólo entre Intereses Vitales y Estratégicos, sino entre éstos y las Políticas Públicas de Estado o de Gobierno, que son las que los pueden llegar a motorizar. Es indudable que entre éstos tres planos debe haber, además, una coherencia, en la medida en que configuran una estructura lógica.
Listado de Intereses Vitales
El siguiente listado es meramente enunciativo y no postula, por tanto, un orden de priorización.
- La protección de la vida, de los bienes y de la libertad de los ciudadanos y habitantes de nuestro país.
- La capacidad del Estado para el sostenimiento permanente del sistema de gobierno representativo, republicano y federal, en el marco del sistema de vida democrático.
- El pleno ejercicio de la soberanía nacional.
- El mantenimiento de la integridad territorial.
- El sostenimiento de la autodeterminación de nuestro pueblo.
Listado de Intereses Estratégicos
El siguiente listado es meramente enunciativo y no postula, por tanto, un orden de priorización.
- El crecimiento económico nacional sobre la base de un criterio de desarrollo sustentable.
- El desarrollo social.
- El desarrollo científico tecnológico.
- La preservación sustentable del medio ambiente y de los recursos naturales renovables y no renovables.
- La promoción y defensa del proceso de integración en el marco del MERCOSUR.
- La preservación y promoción de nuestra subregión, como una zona de paz y cooperación.
- La preservación de la paz y la seguridad internacional.
- El fortalecimiento del control sobre nuestros espacios terrestre, marítimo y aéreo.
- La promoción del desarrollo en aquellos espacios territoriales del país, poco poblados.
- La preservación de la Nación respecto de las amenazas tradicionales y de aquellas reconocidas como nuevas amenazas.
- La preservación del posicionamiento argentino respecto del presente y futuro antártico.
- El mantenimiento de la libre navegación en los pasos bi-oceánicos.
- La consolidación de la institucionalidad democrática.
- La preservación de los derechos humanos.
- La preservación de la vida y la seguridad de los ciudadanos argentinos fuera del país, a través del uso de los mecanismos jurídicos legales actualmente vigentes en el contexto de las relaciones internacionales.
- El incremento de la capacidad del Estado argentino para resolver adecuadamente los perjuicios provocados por los efectos no deseables de la globalización.
3. Inserción Global, Continental y Regional de la Argentina
A nuestro entender, los rasgos más generales que describen el nuevo contexto global son los siguientes:
- Un mundo globalizado en los planos financiero, comercial y tecnológico, en el que la globalización de las telecomunicaciones tiene un peso crucial.
- Un constante incremento de la inestabilidad y la incertidumbre.
- La reaparición, con virulencia, de viejos conflictos intra-nacionales (étnicos, políticos, religiosos) e interestatales, en diferentes regiones.
- La proyección de los EEUU como potencia militar hegemónica a escala planetaria.
- El debilitamiento de los Estados nacionales, que sufren la pérdida de algunas de sus atribuciones básicas tradicionales.
- Un mundo cada vez más asimétrico y desigual en materia de desarrollo, así como también en la participación del reparto internacional de las riquezas que genera la humanidad.
- Un mundo en que la política no solo ha perdido prestigio, sino que ha cedido espacio y capacidad transformadora.
- Un mundo que a partir del 11-S aparece más unilateralizado, verticalizado y militarizado.
- Un mundo en el que proliferan nuevas amenazas de tipo no tradicional, difíciles de prever y manejar por parte de los Estados, independientemente de su tamaño.
- Un mundo con una creciente multiplicidad de actores, en el que los Estados nacionales, aunque debilitados, continúan siendo las unidades básicas del sistema internacional.
- Surgimiento de nuevas formas de terrorismo transnacionalizado, que ataca en cualquier lugar del planeta.
- Irrupción con fuerza de nuevos procesos integrativos regionales, en diferentes puntos del planeta.
- Debilitamiento de los organismos internacionales multilaterales.
- Aparición de voces contestatarias, en ocasiones violentas, al proceso globalizador, como las que se expresan a través del llamado Movimiento Globalofóbico.
- Fortalecimiento de los intereses corporativos transnacionales.
- El 11-S, como un punto de inflexión de la política exterior de los EEUU.
- América Latina en particular, es una región que ha tenido y tiene una posición poco significativa respecto de asuntos estratégicos globales.
Inserción de la Argentina en el contexto global
- Se debe advertir inicialmente que el punto de inflexión que ha significado el 11-S no debe ni puede transformarse en la única referencia para el diseño de una agenda propia en materia de Seguridad y Defensa.
- La Argentina debe buscar formas de inserción no confrontativas, a pesar de las posibles áreas de choque de intereses y de agendas. Nuestro país debe procurar establecer agendas de complementariedad, en lo político, económico, social y cultural. Dichas agendas deben sustentarse en posiciones elaboradas, que refuercen, al mismo tiempo que la propia identidad, un camino que se define progresivamente como: fortalecimiento de la institucionalidad argentina, del MERCOSUR, de América del Sur, del Hemisferio, del Mundo.
- Se debe entender el contexto global actual como una oportunidad que se nos abre para recuperar nuestra relevancia tanto en la subregión, como a nivel hemisférico y contribuir a que la propia subregión mejore su posicionamiento internacional.
- Debe prestarse especial atención a la circunstancia de que el Estado nacional presenta cierta debilidad institucional. Sus instrumentos y recursos no se hallan hoy suficientemente articulados para cumplir adecuadamente con su cometido, lo que implica una dificultad para alcanzar una satisfactoria inserción internacional de nuestro país.
La inserción de la Argentina en materia de Seguridad Internacional a nivel global
En lo relativo a la seguridad internacional, la actuación argentina tendrá lugar a través de y procurando incidir en los organismos multilaterales como la ONU y la OEA.
En estos organismos, los principales intereses estratégicos a defender y promover son: el fortalecimiento de la paz y la seguridad internacionales, procurando al propio tiempo el funcionamiento eficiente de los mecanismos para la lucha combinada contra el terrorismo transnacional.
Un aspecto significativo del rol argentino en materia de contribución a la paz internacional es la participación en operaciones de paz en el marco de Naciones Unidas o en aquellas coaliciones que no se opongan a los principios establecidos en la Carta de dicho organismo, referidos en sus artículos seis y siete.
Argentina debe contribuir también a elaborar, promover y sostener un Sistema Internacional basado en reglas claras que reflejen los valores que como sociedad sustentamos.
En el marco continental
Argentina debe fortalecer su accionar en el diseño de un Sistema de Seguridad Hemisférico eficaz, capaz de articular, en el marco del Sistema Interamericano, los diferentes organismos que lo integran, entre los cuales se cuentan la OEA, la Comisión de Seguridad de dicho organismo, el CICAD, el CICTE, el Tratado de Bogotá, el grupo Río, el TIAR, el mecanismo de reuniones de expertos en medida de Confianza y Seguridad, las Reuniones de Ministros de Defensa y la JID.
También en este nivel es un interés estratégico de la Argentina el contribuir a la lucha integral contra el terrorismo transnacional y contra el flagelo del narcotráfico.
En el marco subregional
Los intereses estratégicos de la Argentina, en materia de seguridad en este nivel, están constituidos por el fortalecimiento del proceso de integración subregional, en particular la operacionalización del MERCOSUR ampliado como zona de paz, así como también la lucha combinada contra el narcotráfico y el terrorismo transnacional.
Argentina promoverá dentro del marco de los acuerdos de MERCOSUR, el diseño de una política de seguridad cooperativa a nivel subregional, con implicancias concretas en el plano de la defensa y dentro de ella de la cooperación militar específica, tal y como se viene ya desarrollando.
La mayor contribución de Argentina al Sistema Internacional de Seguridad es, en primer lugar, garantizar su propia estabilidad y sustentabilidad. Ambas deberían basarse en una agenda propia que tienda a fortalecer los objetivos estratégicos y vitales previamente definidos.
El fortalecimiento del Estado como instrumento articulador de los intereses sectoriales y del conjunto, así como el aporte de la propia legitimidad a la institucionalidad del sistema internacional, constituyen la mejor protección posible de los intereses nacionales. De lo contrario, el aislamiento internacional, la ilegitimidad y el debilitamiento del Estado se convierte en una de las más peligrosas vulnerabilidades.
4. La Seguridad Hemisférica y la seguridad en el marco del MERCOSUR
- Es posible avanzar en el fortalecimiento del Sistema de Seguridad Hemisférico a partir del desarrollo y fortalecimiento de sistemas subregionales de seguridad, sustentados en el concepto básico del fortalecimiento de la cooperación con preservación de las identidades propias, al mismo tiempo que ir avanzando en esquemas de defensa subregionales comunes.
- Dada la existencia de debates previos vinculados a la vigencia del TIAR, realizados en diferentes países latinoamericanos, y la denuncia que México ha realizado del Tratado, se abre hoy la posibilidad de comenzar a desarrollar una evaluación del mismo. Esto se reafirma a partir de lo convenido en la Conferencia Especial de Seguridad de la OEA, reunida en México, en octubre de 2003 y a la luz de los nuevos contextos global y regional.
- En dicho marco es también necesario desarrollar mayores precisiones respecto del concepto de multidimensionalidad de la seguridad, que hoy se debate en el hemisferio.
- Respecto de la seguridad en el ámbito del MERCOSUR, es posible que con el actual grado de desarrollo alcanzado por este esfuerzo de confluencia y en base a una estrategia que abarque al MERCOSUR ampliado, se pueda ir abordando acuerdos referidos a la defensa conjunta de intereses propios asumidos como interés común por parte de todos sus miembros, como podrían ser:
- El ejercicio pleno de cada Estado de su soberanía y el resguardo de su integridad territorial frente amenazas provenientes de afuera de la subregión.
- El ejercicio pleno del control efectivo de los respectivos espacios territoriales, aéreos y marítimos, por parte de cada Estado.
- El mantener a América del Sur como zona libre de armas de destrucción masiva; el contrarrestar a través de la cooperación, las acciones del terrorismo transnacional y del narcotráfico, así como también del contrabando de armas
- El contribuir en la sub-región a la defensa del medio ambiente mediante acciones conjuntas y articuladas.
Coordinadores: Lic. Jaime Garreta y Cnl. Osvaldo Tosco
Frimantes del dictamen:
CFIM Roberto L. V. Alemanno
Dr. Juan Belikow
Lic. Fabián Bossoer
Lic. Anabella Busso
Lic. Oscar R. Cardoso
Lic. Julio Cirino
Brig. My. (R) Carlos E. Corino
CN. (R) Alberto Dabini
Lic. Gustavo Druetta
Dr. Roberto Duarte
Lic. Erica Farcic
Dr. Juan C. Frías
Lic. Jaime Garreta
Lic. Hebe Gazzotti
Lis. Jessica Hechem
Dr. Leonardo Hekimián
Lic. Martín E. Lagorio
CL. (R) Julio Lavezzo
Lic. Gladys Lechini
Lic. Elsa Llenderrozas
Lic. Ernesto López
Cnl. Guillermo A. Lucero
Dr. Pablo Martínez
Lic. Sebastián Muñoz
Lic. Fernando Ohanessian
Com. (R) Jorge Peralta Monti
Dr. Ricardo L. Quellet
Dr. Juan A Rial
Vcom. Raúl G. Rodolfo
Cnl. Antonio Serrano
Lic. Ángel Tello
Lic. Luis Tibiletti
Cnl. Osvaldo Tosco
Lic. José María Vázquez Ocampo
Emb. Pedro Villagra Delgado