Título: Ecuador. Libro Blanco de la Defensa Nacional - Las Fuerzas Armadas
LAS FUERZAS ARMADAS
El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas
En el Registro Oficial N° 232-R, del 10 de mayo de 1971, se publica el Decreto Ejecutivo N° 063, de fecha 29 de abril del mismo año, suscrito durante la presidencia constitucional del Dr. José María Velasco Ibarra, por el cual se promulga la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas, que, en su capítulo III, Art. 22 lit. b), determina que el Comando Conjunto es un organismo superior de las Fuerzas Armadas y participa directamente en la preparación y conducción estratégica de las operaciones militares. A partir de esta fecha inicia sus actividades el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, reemplazando a lo que anteriormente se conocía como "Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas".
El Comando Conjunto, como organismo de asesoramiento permanente para la seguridad nacional y de dirección militar de las Fuerzas Armadas, es el encargado de organizar y mantener el poder militar, en los procesos que garanticen la seguridad de la nación y propendan a su desarrollo, con la finalidad de contribuir a la consecución y mantenimiento de los objetivos nacionales, de acuerdo a la planificación prevista para tiempo de paz, de conflicto y de guerra.
Como órgano de dirección estratégica de las Fuerzas Armadas, está integrado por el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y los comandantes generales de la Fuerza Terrestre, Fuerza Naval y Fuerza Aérea. Desarrolla su planificación conjunta sobre la base de la Directiva de Defensa Nacional, emitida por el Ministerio de Defensa Nacional, la que prevé el empleo conjunto de los medios destinados a la defensa militar de la nación.
Entre sus atribuciones y deberes, se encuentran asesorar al Presidente de la República y al director del Frente Militar en la conducción de la política de guerra, así como en el estudio y solución de problemas relacionados con la seguridad nacional; dirigir la preparación y empleo conjunto o combinado de las Fuerzas Terrestre, Naval y Aérea, a través de las respectivas comandancias, de conformidad con las planificaciones pertinentes; planear la organización, preparación y empleo militar de la Policía Nacional para la seguridad interna y la defensa militar del país, como fuerza auxiliar; someter, a través del Ministerio de Defensa Nacional, a la consideración y aprobación del Consejo de Seguridad Nacional el planeamiento estratégico militar y la delimitación de los siguientes espacios geográficos nacionales:
- La circunscripción territorial prevista para las operaciones.
- Las zonas de defensa.
- Las áreas estratégicas para la seguridad nacional.
- Las áreas reservadas, prohibidas y restringidas.
El Comando Conjunto de las Fuerzas Amadas cumple con sus tareas constitucionales, apegado a los cambios y requerimientos sociales, con el firme propósito de proyectarse al futuro, para alcanzar una institución armada moderna, al servicio de la patria.
El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas conduce operaciones militares conjuntas, para preservar la soberanía nacional, defender la integridad e independencia del Estado, garantizar el ordenamiento jurídico y apoyar al desarrollo social y económico del país.
Organigrama del Comando Conjunto de las FF.AA.
Fuerza Terrestre
En nuestro ámbito geográfico e histórico, las tribus que formaron las diferentes etnias asentadas en territorio ecuatoriano tuvieron que organizarse para defender sus tierras e impedir que parcialidades ajenas trataran de ubicarse en el callejón interandino o en las cálidas regiones costaneras. Para ello elaboraron sus propias armas rudimentarias que les sirvieron para su defensa y seguridad.
Encarnizadas fueron las guerras que el ejército defensor del antiguo Reino de Quito tuvo que mantener durante varios años contra la invasión de los incas y luego contra los conquistadores españoles, hasta ser vencidos. La historia recoge los nombres de los caudillos indígenas Rumiñahui, Quisquis, Calicuchima, Eplicachima, Nazacota Puento, Razo Razo, Quingalumba, Zopozopangui y otros, que demostraron la pericia militar adquirida en largos años de continuas luchas.
Durante la etapa colonial, el rey Carlos III resolvió que los quiteños puedan enrolarse en el Real Ejército de Indias, formando las primeras compañías de milicianos. Con el paso de los años la idea de libertad nació, fue sostenida y dio sus primeros frutos. El 10 de agosto de 1809, un grupo de quiteños desconocieron el gobierno del presidente de la entonces Real Audiencia de Quito, lo derrocaron y formaron una nueva Junta de Gobierno, nombrándose a Juan de Dios Morales como primer Ministro de Guerra y conformándose la primera fuerza armada, integrada por tres batallones de infantería y una compañía de granaderos, bajo el mando de Juan Salinas. Así se inició el primer movimiento de libertad en Quito. Posteriormente, en la segunda etapa de este intento independentista, en 1812, el coronel Carlos Montúfar comandó las milicias del efímero Estado.
La independencia en el Ecuador se afirmó en Guayaquil el 9 de octubre de 1820, cuando los patriotas de ese puerto destituyeron a las autoridades realistas y se pronunciaron por la libertad. Posteriormente, se desarrolló la campaña libertaria que culminaría con la Batalla de Pichincha, en donde se consolidó la independencia de nuestro Estado.
Como parte de la Gran Colombia, el Departamento del Sur aportó con contingentes de oficiales y tropa a la formación de un ejército que el 27 de febrero de 1829 defendió exitosamente el territorio nacional invadido por el Perú. La batalla de Tarqui afirma la identidad histórica al Ejército nacional, estructurándose sobre esta base la fuerza armada del nuevo Estado ecuatoriano.
En 1838, en la presidencia de Vicente Rocafuerte, se inauguró el primer Colegio Militar en el país, que tuvo como sede el antiguo Convento de San Buenaventura, aunque su vigencia fue irregular.
El advenimiento del general Eloy Alfaro, como Jefe Supremo de la República y Comandante General del Ejército, marca el inicio de la profesionalización militar. En 1900 se funda la Academia de Guerra, con el objeto de formar oficiales de Estado Mayor y Comandantes Superiores de tropas; en el mismo año se estableció la Escuela de Clases, destinada a la instrucción de cabos y sargentos para el Ejército.
La modernización del Ejército se desarrolla con mayor intensidad en el gobierno militar del general Guillermo Rodríguez Lara, en el cual se define la planificación estratégica nacional, posicionando a las Fuerzas Armadas y orientando sus esfuerzos a otras misiones no tradicionales, como la de apoyar al desarrollo del Estado.
Misión
La Fuerza Terrestre, como uno de los órganos del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, participa en la conservación de la soberanía nacional y la defensa de la integridad e independencia del Estado; garantiza su ordenamiento jurídico; contribuye al desarrollo social y económico del país, así como coopera o interviene, según el caso, para el mantenimiento del orden constituido, con la finalidad de coadyuvar a la consecución de los objetivos nacionales.
Las unidades de la Fuerza Terrestre se emplean como parte de las fuerzas de tarea conjuntas, de acuerdo al Plan Militar de Defensa Interna del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. En tiempo de guerra las unidades operativas y tácticas de la Fuerza Terrestre, como parte de la fuerzas de maniobra conjuntas, defienden el territorio nacional, de acuerdo al Plan Militar de Guerra del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
El Ejército ecuatoriano ha participado en actividades de mantenimiento de la paz con observadores militares en las Repúblicas de Nicaragua y el Salvador. Con el personal de oficiales y tropa ha participado en cursos y ejercicios de operaciones de mantenimiento de la paz en Argentina y Chile. La planificación estratégica institucional tiene como uno de sus objetivos el alcanzar una participación significativa en este tipo de operaciones. La Fuerza Terrestre es, además, miembro fundador de la Conferencia de Ejércitos Americanos, que constituye un organismo multilateral para fomentar la integración y cooperación de los ejércitos del continente.
Organización
La Fuerza Terrestre tiene un mando superior radicado en la Comandancia General, que es su máxima autoridad institucional. Para el desarrollo de sus tareas, cuenta con el Estado Mayor General de la Fuerza Terrestre y el Estado Mayor Planificador, como organismos de asesoramiento para la toma de decisiones. Se encuentra conformada por unidades tácticas que cubren el territorio nacional, a las que se agregan los comandos de apoyo de combate y apoyo de servicio de combate. Como organismo de control de las actividades institucionales se desempeña la Inspectoría General de la Fuerza Terrestre.
El Ejército está conformado por armas y servicios, que cumplen funciones acordes con sus características, tanto de forma individual como de carácter combinado. Dentro de las armas están la Infantería, Caballería Blindada, Artillería, Ingeniería, Aviación del Ejército, Comunicaciones e Inteligencia Militar. Los servicios logísticos son los de Material de Guerra, Intendencia, Transporte y Sanidad, así como servicios administrativos.
Unidades operativas
La presencia de la Fuerza Terrestre en el país comprende las siguientes unidades:
- Primera División de Ejército: cubre las provincias de Carchi, Imbabura, Pichincha, Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo y Bolívar.
- Segunda División de Ejército: corresponde a la jurisdicción de las provincias de Guayas, Manabí, Los Ríos y Esmeraldas.
- Tercera División de Ejército: cubre las provincias de Cañar, Azuay, El Oro y Loja.
- Cuarta División de Ejército: tiene jurisdicción en la región amazónica; esto es las provincias de Sucumbíos, Orellana, Napo, Pastaza, Zamora - Chinchipe y Morona - Santiago.
Unidades de apoyo administrativo y logístico
Los organismos que proporcionan este tipo de apoyo a las distintas unidades de la Fuerza Terrestre son:
- Brigada de Apoyo Logístico ( B.A.L.).
- Cuerpo de Ingenieros de la Fuerza Terrestre (C.E.E.).
- Dirección de Industrias del Ejército (D.I.N.E.).
- Comando de Apoyo Logístico Electrónico (C.A.L.E.).
Organigrama de la Fuerza Terrestre
Capacidades
El Ejército, dentro de su estructura, dispone de medios materiales distribuidos entre todas las unidades de combate, apoyo de combate y de apoyo al servicio de combate, de acuerdo a las características del terreno donde va a emplearse y fundamentalmente a la misión que tienen que cumplir.
El Ejército, preocupado por su crecimiento y proyección institucional futura, ha implementado un Estado Mayor Planificador, que es responsable de planificar y contribuir al fortalecimiento de la fuerza mediante la implementación de los proyectos a corto, mediano y largo plazo, que permitirán desarrollar y mantener una fuerza disuasiva, flexible y rápida, capaz de ser empleada en cualquier sitio del territorio nacional en forma inmediata. El objetivo es enfrentar los retos presentes y futuros y poder cumplir con eficacia y eficiencia las responsabilidades encomendadas a la Fuerza Terrestre por la Constitución de la República. Las áreas estratégicas consideradas son Planificación, Finanzas, Inspectoría, Logística, Operaciones, Aviación de Ejército, Inteligencia, Comunicaciones y Sistemas, Organización, Educación, Doctrina, Personal, Bienestar de Personal, Comunicación Social, Sanidad y Mantenimiento.
Educación
La educación es uno de los pilares fundamentales de la modernización institucional, en la medida en que es una de las áreas donde se inicia todo proceso que aspire a proyectar una organización hacia el futuro. La educación militar considera como elemento fundamental del sistema al ser humano, al cual se forma en las áreas valórica, de formación profesional, científica, humanista y de capacidad física. En este contexto, la educación en la Fuerza Terrestre se desarrolla considerando el modelo educativo, que determina lineamientos generales para la formación, perfeccionamiento y especialización de oficiales y tropa.
La formación de oficiales se desarrolla en la Escuela Superior Militar "Eloy Alfaro", de la cual egresan los aspirantes alcanzando el grado de subtenientes de arma y de servicios, con conocimientos y aptitudes que les permiten comandar repartos hasta el nivel de pelotón y similares, así como el de tenientes especialistas, para satisfacer las necesidades técnico profesionales de la Fuerza Terrestre. Al egresar de la Escuela Militar, el oficial adquiere además el título de licenciado en Ciencias Militares.
La formación integral del militar orienta sus esfuerzos al fortalecimiento del liderazgo que permita la consecución de los objetivos institucionales. En esta dimensión se busca que el profesional militar capitalice su vocación en valores éticos y morales; en el rigor de las exigencias castrenses, con sólidas bases de liderazgo; en el conocimiento de la historia militar y de los derechos humanos, además de lograr una formación tecnológica que le permita desempeñarse eficientemente y coadyuvar a la misión de la institución.
La capacitación profesional del personal de oficiales se desarrolla a lo largo de la carrera considerando como principio la educación permanente. Para ello se lo perfecciona en diferentes niveles, en función de su jerarquía.
El perfeccionamiento en el nivel de Estado Mayor de Arma y Servicios es responsabilidad de la Academia de Guerra de la Fuerza Terrestre, en la cual se capacita a oficiales superiores para el desempeño de funciones de Comando y Estado Mayor a nivel de brigada y división, preparándoles para la administración de las unidades de la Fuerza Terrestre en tiempo de paz, su conducción militar en tiempo de guerra y para la participación en las actividades de defensa nacional y apoyo al desarrollo.
El militar estudiará el arte de la guerra en los grados superiores, donde privilegiará el sentido organizativo, prospectivo y planificador, considerando un entorno cambiante, las condiciones para fortalecer los conceptos de defensa y desarrollo nacionales y divulgarlos a la sociedad. La profesionalización del personal de la Fuerza Terrestre implica un continuo aprendizaje y el entrenamiento científico de sus miembros, con el ánimo de formar cuadros más instruidos y elevar su nivel profesional, en el afán de optimizar no solamente el cumplimiento de su misión fundamental como combatiente, sino también las actividades cotidianas en tiempo de paz.
A través de la educación superior se promueve la formación y perfeccionamiento de un profesional capaz de contribuir a la solución de los problemas de la institución militar, con una educación basada en la ciencia y la tecnología, en la cual las comunicaciones, la informática y el inglés se constituyen en insumos fundamentales para la configuración de su perfil de combatiente, educador y administrador de recursos humanos, económicos y materiales, de acuerdo con su nivel de responsabilidad, la que crece progresivamente, como crece su jerarquía y su ámbito de acción.
La Fuerza Terrestre, para la educación superior, cuenta con la Escuela Politécnica del Ejército (ESPE), cuya misión es formar en la excelencia a profesionales e investigadores, con pensamiento crítico y alta conciencia ciudadana, capaces de generar, aplicar y difundir el conocimiento y proporcionar e implementar alternativas de solución a los problemas de la colectividad, para promover el desarrollo integral del Ecuador.
La formación del personal de tropa se realiza en la Escuela de Formación de Soldados de la Fuerza Terrestre, cuya misión es formar soldados de alto nivel, con sólidos conocimientos en las áreas militar, científica, técnica y física, dotados de valores, capaces de cumplir funciones y tareas en cualquier escenario y de mantenerse a la vanguardia de la ciencia y tecnología que exige el mundo actual. El soldado se forma para convertirse en un experto en el conocimiento del terreno, de las técnicas de movimiento en diferentes escenarios y del empleo de las armas básicas y conocedor de las leyes y reglamentos militares, que le permitirán desenvolverse en el marco de la disciplina y de los derechos humanos.
La capacitación profesional del personal de voluntarios se realiza mediante los cursos de perfeccionamiento, que lo habilitan para el desempeño de funciones de acuerdo a su jerarquía. Su formación se orienta al empleo de las armas colectivas, de los servicios y de las especialidades, convirtiéndolo, además, en un instructor con conocimiento pedagógico y didáctico moderno. Simultáneamente a los aspectos militares, el clase recibe una educación complementaria en las áreas de administración, pedagogía, informática e idiomas, cuyos niveles de estudio con títulos terminales se convertirán en requisito para su ascenso a suboficial.
Contribución al desarrollo e industria militar
La Fuerza Terrestre vive etapas de continua transformación. Los cuarteles se han convertido en centros de estudio, en talleres, fábricas y laboratorios, para que nuestros soldados se incorporen, con dedicación y esmero, a la gran cruzada que busca el bienestar y desarrollo de la patria, considerando que se requiere el aporte de todos los ecuatorianos, civiles y uniformados, para ganar la batalla contra el hambre, la pobreza, la enfermedad, la desnutrición y la injusticia, los principales factores de descomposición que amenazan a la nación.
En este contexto, es necesario mencionar que la Fuerza Terrestre, en el marco de las estrategias de las Fuerzas Armadas, ha emprendido planes y programas de apoyo al desarrollo y mantiene algunas empresas que aportan a la solución de los requerimientos de la defensa nacional y contribuyen al desarrollo socio económico del país, generando empleo para miles de ecuatorianos; participa en la educación estudiantil; desarrolla proyectos científicos y mejora la infraestructura vial nacional.
La industria militar se basa en el desarrollo tecnológico establecido por las industrias del holding Dirección de Industrias del Ejército (DINE), que agrupa a las fábricas productoras de artículos destinados a uso militar, tales como uniformes, calzado, equipo individual y de unidad, munición y armamento de diferentes calibres.
Apoyo a la investigación
La Fuerza Terrestre contribuye al desarrollo de la ciencia y tecnología del país, a través de organismos con misiones en campos específicos, cuyo nivel tecnológico y organizacional les convierte en modelos en su género.
El Instituto Geográfico Militar (IGM) es una entidad de derecho público con autonomía administrativa y patrimonio propio, orgánica y disciplinariamente subordinada a la Comandancia General del Ejército, con sede en la ciudad de Quito. Tiene bajo su responsabilidad la planificación, organización, dirección, coordinación, ejecución, aprobación y control de la cartografía nacional y del archivo de datos geográficos y cartográficos del país.
Los 72 años de trayectoria del Instituto Geográfico Militar le permiten cumplir con éxito su misión de proporcionar la cartografía básica del territorio ecuatoriano, elemento indispensable para la planificación de proyectos y obras de trascendencia para el país, como trazados de vías, trabajos de ingeniería, prospección minera, ordenamiento urbano y catastros, entre otros. Además, presta asesoramiento a entidades públicas y empresas en lo relacionado con levantamientos aerofotogramétricos, trabajos topográficos, implementación de sistemas catastrales urbanos y rurales multifinalitarios, trabajos geodésicos, posicionamiento satelitario, cartografía digital, cartografía temática, monitoreo multitemporal de volcanes a través de fotografía aérea y estudios geográficos.
El Centro de Levantamientos Integrados de Recursos Naturales por Censores Remotos (CLIRSEN), como estación remota de imágenes satelitarias, es una entidad ecuatoriana de derecho público con autonomía técnica y administrativa, adscrita al Instituto Geográfico Militar. Fue creada el 7 de diciembre de 1977, mediante decreto Nº 2027, publicado en el Registro Oficial Nº 486, del 19 de diciembre del mismo año.
Es el organismo encargado de formar el inventario nacional de los recursos naturales, tanto renovables como no renovables; planifica, organiza, dirige, coordina, ejecuta y controla las actividades concernientes a la técnica de censores remotos; contribuye al levantamiento cartográfico del Ecuador y a la elaboración de mapas temáticos; presta asesoramiento técnico a las instituciones públicas y privadas en las materias relacionadas con su actividad.
En su afán de servicio a la comunidad, desde octubre de 1989, tomó a su cargo la operación del Planetario de la Mitad del Mundo, de propiedad del Consejo Provincial de Pichincha, y, desde junio de 1990, el Planetario de la ciudad de Cuenca, extendiendo así su programa de divulgación. Estos centros están destinados a la difusión de la astronomía y ciencias afines.
Fuerza Naval
La Marina de Guerra del Ecuador nació, como institución del Estado, al mismo tiempo que se constituía la República como entidad política independiente, pues al producirse el desmembramiento de la Gran Colombia quedaron en poder del Estado ecuatoriano todos los buques que integraban la Fuerza Naval del Distrito del Sur, entre los cuales se contaban las fragatas Colombia y Cundinamarca.
El 9 de octubre de 1822, por disposición del Libertador Simón Bolívar y por iniciativa del capitán de navío don Juan Illingworth, se estableció en la ciudad de Guayaquil la Escuela Náutica. En 1938 se creó la escuela de pilotines de la Marina Mercante, que funcionaba a bordo del buque cañonero Calderón.
En 1941 se produce el primer enfrentamiento naval en aguas territoriales ecuatorianas; en esta acción, el cañonero Calderón, al mando del comandante Rafael Morán Valverde, se cubrió de gloria en Jambelí.
El Ecuador, al constituir parte de la Cuenca del Pacifico y tener proyección amazónica, ocupa una posición estratégica bioceánica privilegiada, con un factor de desarrollo económico de enorme potencial. Cobrar conciencia de la importancia de desarrollar un poder naval que nos permita defender los intereses marítimos ecuatorianos y mantener las líneas de comunicaciones marítimas abiertas fue una tarea de varias generaciones que comprendieron que el futuro del Ecuador está en el mar y que defender esta heredad demanda constancia, perseverancia y sobre todo el desarrollo de una Marina altamente profesional y eficiente, garante de la soberanía del Ecuador en el mar.
Misión
Como uno de los órganos del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, la Armada organiza, entrena, equipa y mantiene el poder naval, así como participa en los procesos que garantizan la defensa de la nación y propenden a su desarrollo, con la finalidad de contribuir a la consecución y mantenimiento de los objetivos nacionales, de acuerdo con la planificación prevista para tiempo de paz y de guerra.
Las unidades operativas de la Fuerza Naval, como parte de la fuerzas de maniobra conjuntas, defienden el territorio nacional de acuerdo a la planificación militar impuesta por el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Las unidades de la Fuerza Naval se emplean como parte de las fuerzas de tarea conjuntas, de acuerdo al Plan Militar de Defensa Interna del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. Además, la Fuerza Naval cumple las siguientes tareas:
- Desarrolla y mantiene un poder naval defensivo.
- Mantiene la presencia naval en áreas de interés del Estado.
- Contribuye al alistamiento conjunto, de acuerdo con los requerimientos estratégicos.
- Fomenta la conciencia marítima y el desarrollo de los intereses marítimos.
- Contribuye con contingente humano calificado, para conformar las fuerzas en misiones de paz de las Naciones Unidas, así como para participar en ejercicios multinacionales, de acuerdo con los convenios suscritos.
Organización
El mando superior de la Armada Nacional es ejercido por el Comandante General, quien integra el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Como órganos de administración, asesoramiento y control, la Fuerza Naval cuenta con el Estado Mayor, que asesora en temas estratégicos, administrativos y ejecutivos, planifica, administra y ejecuta la política institucional, y con las diferentes direcciones y comandos operativos.
El Comandante de Operaciones Navales detenta el mando superior de las unidades operativas de la Fuerza Naval, que incluyen unidades de superficie, submarinas, aeronavales y de infantería de marina y cuya función básica es la de preparar, administrar y conducir las fuerzas operativas en la ejecución de operaciones militares.
Administrativamente, el Comando de Operaciones Navales está organizado de la siguiente manera:
- Escuadra Naval.
- Escuadrón de Submarinos.
- Aviación Naval.
- Infantería de Marina .
- Comando de Operaciones Norte.
- Comando de Operaciones Insular.
- Buque Escuela "Guayas".
- Zonas Navales.
Los comandos tienen asignados buques, aviones y submarinos, medios con los que efectúan entrenamientos durante la paz, para su empleo estratégico en caso de conflicto o guerra, de acuerdo a las misiones que reciban.
Para el ejercicio de la jurisdicción penal militar el territorio de la República se divide en zonas.
Primera Zona Naval. Su sede está en la ciudad de Guayaquil. Ejerce jurisdicción en las provincias de Guayas, El Oro, Los Ríos, Manabí, Cañar, Azuay, Loja, Morona Santiago y Zamora Chinchipe, así como en el mar territorial adyacente a las tres provincias de la región litoral.
Segunda Zona Naval. Su sede y la del Comando de Operaciones Insular es Puerto Baquerizo Moreno, en la isla San Cristóbal. Ejerce jurisdicción en la provincia de Galápagos y el mar territorial adyacente.
Tercera Zona Naval. Su sede y la del Comando de Operaciones Norte se encuentra en la ciudad de Esmeraldas. Ejerce jurisdicción en las provincias de Esmeraldas, Carchi, Imbabura, Pichincha, Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo, Bolívar, Napo, Pastaza, Sucumbíos y Francisco de Orellana, así como en el mar territorial adyacente. Incluye la administración de la Compañía de Infantería de Marina de San Lorenzo.
Zonas de Defensa Naval
MT = Mar Territorial de 200 millas
AI = Aguas Interiores
PC = Plataforma Continental (Proclama de 1985)
Las zonas navales apoyan a las fuerzas operativas en asuntos administrativos y logísticos.
La Fuerza Naval cuenta con órganos responsables de los sectores de material y administración de personal.
Los organismos de apoyo a la Fuerza Operativa Naval, al mando del Director General del Material, son:
- Dirección de Ingeniería Naval.
- Dirección de Electrónica, Comunicaciones y Armamento.
- Dirección de Abastecimientos.
- Dirección de Investigación y Desarrollo.
- Dirección de Ingeniería Civil y Portuaria.
- Base Naval de Guayaquil.
- Base Naval de Jaramijó.
Los organismos con actividades relacionadas con el personal, en los campos de administración, educación, salud y bienestar, actúan bajo el mando del Director General del Personal.
Desarrollo
Están integrados en este importante ámbito de actividad la Marina Mercante y los Intereses Marítimos.
Marina Mercante
La Marina Mercante está constituida por todos los organismos que le permiten al Estado ejercer la autoridad marítima a nivel nacional, al mando del Director General de la Marina Mercante y del Litoral. Tiene como misión aplicar las políticas nacionales en este campo y dar cumplimiento a las funciones estatales concernientes a las actividades relacionadas con el transporte por agua, los puertos y la formación y perfeccionamiento del personal mercante; establecer políticas y estrategias sectoriales, aplicarlas y controlar su ejecución; ejercer el control y las funciones de policía marítima y fluvial y preservar el medio ambiente y la vida humana en el mar, asesorando al Consejo Nacional de Marina Mercante y Puertos y al mando de la Fuerza Naval en materias de su competencia.
Para cumplir estas funciones el sector esta organizado de la siguiente manera:
- Cuerpo de Guardacostas.
- Escuela de la Marina Mercante Nacional.
- Capitanías de Puerto.
- Superintendencias de Terminales Petroleros.
Organigrama de la Fuerza Naval
Intereses marítimos
Intereses Marítimos está constituido por los organismos encargados de la investigación, desarrollo y fortalecimiento de los intereses marítimos, al mando del Director General de Intereses Marítimos. Desarrolla la planificación en alto nivel del desarrollo y empleo del poder marítimo, excluyendo lo relacionado al poder naval.
Para cumplir esta función básica este sector esta organizado de la siguiente manera:
- Instituto Oceanográfico de la Armada.
- Servicio de dragas.
- Instituto de Historia Marítima.
Capacidades y medios
Fuerza de Superficie: está constituida por unidades de línea de diferente tipo y tonelaje, con capacidades para cumplir operaciones antisuperficie, antisubmarina, antiaérea y contracosta, contando la mayoría de ellas con el apoyo de helicópteros embarcados. Son buques esenciales para constituir fuerzas o grupos de tarea para el ejercicio del control del mar, en cumplimiento de sus misiones constitucionales. Hacen parte de esta fuerza también unidades auxiliares de apoyo logístico, que permiten mantener el esfuerzo operacional del poder naval en caso de conflicto o guerra, mientras en época de paz, además de realizar esta tarea fundamental, cumplen tareas de apoyo al desarrollo nacional y en bien de la comunidad, particularmente de aquella de la región insular.
Esta fuerza constituye el núcleo principal de la Fuerza Operativa Naval, denominada históricamente "La Escuadra Naval", estructurada con fines administrativos y operacionales en escuadrones conformados por unidades del mismo tipo o propósito común, de la siguiente manera:
- Escuadrón de Fragatas.
- Escuadrón de Corbetas.
- Escuadrón de Lanchas Misileras.
- Escuadrón de Auxiliares.
La Fuerza de Superficie tiene como principal soporte operativo y logístico las bases continentales de Guayaquil y Jaramijó y la base insular de San Cristóbal.
Fuerza Aeronaval: está conformada por unidades de ala fija y rotatoria de diferentes tipos, con capacidades para cumplir operaciones de exploración aeromarítima, apoyo aéreo, transporte, antisuperficie y antisubmarina, operando desde bases o puntos de despliegue estratégico en tierra o desde las plataformas de las unidades de superficie.
Fuerza de Infantería de Marina: está conformada por sus batallones operativos, de seguridad, de apoyo logístico y el Centro de Formación de Infantes de Marina. Se le asignan además tareas orientadas a la defensa y desarrollo interno, para contribuir con la sociedad civil en los distintos puntos donde existen dichas unidades, especialmente en la región noroccidental, para mantener la estabilidad política e impulsar la seguridad y el desarrollo, tanto en San Lorenzo como en Esmeraldas.
Unidades Submarinas: conformadas el 16 de marzo de 1978, cumplen su misión en las operaciones para entrenamiento de ejercicios submarinos y antisubmarinos con las restantes unidades de la Escuadra, permaneciendo siempre vigilantes y ejerciendo soberanía en nuestro mar territorial y en sus profundidades y desplegando un gran poder defensivo frente a las potenciales amenazas. Esta fuerza está compuesta por submarinos de la clase U 209, de fabricación alemana.
Cuerpo de Guardacostas: se conformó el 25 de julio de 1980, con unidades asignadas a la autoridad marítima para realizar las siguientes tareas:
- Controlar el tráfico marítimo, para precautelar la soberanía en las áreas de control de pesca, contrabando y otras actividades ilícitas, contribuyendo a minimizar con su acción la pérdida de vidas humanas, daños personales y a la propiedad en aguas jurisdiccionales.
- Precautelar la seguridad para buques, puertos, vías marítimas y facilidades inherentes a estos.
- Mantener y mejorar la calidad del ambiente marino y contribuir a la reducción de daños en caso de contaminación.
- Resguardar la moral y el orden en buques, puertos, muelles y playas.
- En caso de conflicto, pasar a formar la fuerza de defensa de costas, juntamente con la reserva movilizada y la Infantería de Marina, encargadas de la defensa de costas, en coordinación con la Fuerza Terrestre y con el apoyo de la Fuerza Aérea.
Educación naval e investigación científica
La Escuela Superior Naval es el centro de formación del oficial naval. En ella se forman todos los oficiales de arma, técnicos, de servicios y especialistas.
Los tripulantes se forman en la Escuela de Grumetes Navales; la Escuela básica de Infantería de Marina forma al personal de esta fuerza. En el Centro Tecnológico Naval complementan su formación básica y se especializan los tripulantes, obteniendo títulos técnicos de nivel medio o superior. El proceso de subespecialización y perfeccionamiento se lo realiza en institutos especializados nacionales o extranjeros, según los requerimientos institucionales.
La capacidad de investigación científica de la Armada se ejercita en el buque hidrográfico y oceanográfico "Orión" y la lancha "Rigel", que ejecutan labores de investigación científica durante los cruceros continentales y a las islas Galápagos. Se ejecutan también cruceros costeros y eventualmente se realizan expediciones a la Antártida, en la cual se mantiene la base científica "Pedro Vicente Maldonado". Además, se monitorea, mantiene y moderniza la señalización marítima y la cartografía náutica, lo cual contribuye a la seguridad de la navegación.
Es de suma importancia para el Ecuador el cumplimiento de los convenios internacionales para proteger la vida en el mar y evitar la contaminación, propendiendo a la investigación para la explotación de los recursos del mar y el monitoreo de los fenómenos oceánicos y atmosféricos para prevenir desastres naturales.
Contribución al desarrollo
La Armada participa en el desarrollo de los intereses marítimos del país mediante empresas de transporte de petróleo, construcción naval y agenciamiento marítimo; además, contribuye a la mitigación de desastres y ayuda a poblaciones marginales.
La Armada del Ecuador presta una valiosa contribución al desarrollo del país brindando apoyo logístico a las poblaciones de escasos recursos que viven en lugares marginales de la costa y región insular. Por medio de sus unidades, facilita el transporte de pasajeros y de víveres desde los centros de producción hacia Galápagos y poblaciones asentadas en lugares carentes de infraestructura vial, sobre todo en la región norte de la costa continental, donde existen numerosos caseríos a los que llegan únicamente lanchas guardacostas.
El servicio logístico naval contempla los programas de asistencia en salubridad, construcción de infraestructura básica, provisión de medicinas y asistencia médica gratuita a pobladores de sectores marginales.
La zona costera del país se ve periódicamente azotada por efectos del fenómeno de El Niño, que causa muertos, desaparecidos, heridos y damnificados. En estas circunstancias la Armada es el vehículo principal de socorro y auxilio para las poblaciones afectadas. Por medio del empleo de sus unidades, la Armada evacua a los damnificados y proporciona apoyo logístico en víveres, agua y medicinas, así como en el transporte de personal médico y miembros de la Defensa Civil.
Se ayuda a las poblaciones marginales de escasos recursos mediante vuelos logísticos semanales a la región insular, Esmeraldas y San Lorenzo, trasportando pasajeros, mercaderías, medicinas e insumos sin costo. Además se opera y manteniene la red de faros, balizas y boyas para asegurar la navegación costera e insular, así como el ingreso al canal de Guayaquil. Se mantiene en funcionamiento la red del Servicio Móvil Marítimo de telecomunicaciones costeras, para el servicio de la Marina Mercante y naves pesqueras.
El Ecuador se encuentra en proceso de análisis y definición política de su adhesión a la Convención del Mar (CONVEMAR), que define los lineamientos mundiales para la legislación y uso del espacio marítimo en el orbe.
Fuerza Aérea
La aviación militar en el Ecuador se inicia el 27 de octubre de 1920, fecha en la que el presidente José Luis Tamayo emite el decreto de creación de dos escuelas de aviación militar, una en Quito y otra en Guayaquil. El 31 de diciembre de 1933 nace la Fuerza Aérea Ecuatoriana como organismo independiente de las Fuerzas Armadas. Mediante decreto ejecutivo, el mayor Bayardo Tobar, jefe de la Inspectoría de Aviación del Ejército, pasó a ser el primer Comandante General de la Fuerza Aérea. Es a partir de este año cuando se le confiere a la fuerza la autonomía e independencia del Ejército.
En sus primeros años la Fuerza Aérea se orientó al desarrollo de operaciones de transporte y correo postal. En mayo de 1946 la Fuerza Aérea adquiere un avión C-47 y doce P-47 Thunderbolt, dando inicio a la aviación de combate en el Ecuador. En el período 1954 - 1960, la Fuerza Aérea incorpora a su flota los primeros aviones a reacción: Canberra MK-6, Gloster Meteor, T- 33 Silver Star y F-80C Shooting Star.
En 1978 se incorporan los primeros aviones supersónicos, los Jaguar MK-1 y Mirage F-1. En 1982, con la adquisición a Israel de los aviones Kfir, C-2, se marca un salto tecnológico fundamental en la aviación militar ecuatoriana; se desarrollan nuevas tácticas de empleo del poder aéreo y se avanza en los campos de la electrónica, sistemas de radares y motores.
El 10 de febrero de 1995, durante el conflicto del Alto Cenepa, se realizó el primer combate aéreo en Sudamérica, con resultados victoriosos para la Fuerza Aérea Ecuatoriana.
La Fuerza Aérea ecuatoriana, como uno de los órganos del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, mantiene el control del espacio aéreo y garantiza, con las otras ramas de las Fuerzas Armadas, la soberanía e integridad del Estado ecuatoriano y apoya al desarrollo socio económico del país, principalmente en el ámbito aeroespacial.
Organización
La Fuerza Aérea está estructurada para el empleo operativo y el cumplimiento de tareas en tiempo de paz de la siguiente manera:
Mando
Es ejercido por el Comandante General, quien tiene la responsabilidad de la conducción administrativa de la institución. Es asesorado por el Estado Mayor General en asuntos estratégicos, operativos y de gestión, planificación, coordinación y control de la institución. Además, el Comandante General integra el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, que tiene bajo su mando los órganos de maniobra, que, en el caso de la Fuerza Aérea, es el Comando Aéreo de Combate.
La conducción operacional de la Fuerza la realiza el Comandante del Teatro de Operaciones Aéreo, integrado por el Comando Aéreo de Combate, de Defensa Aérea y de Transportes.
Unidades operativas
El Comando Aéreo de Combate es la unidad responsable del empleo del poder aéreo, constituido por las Alas de Combate, conformadas por los siguientes grupos y escuadrones:
Las Alas de Combate No. 21 y 23. Agrupan escuadrones de aviones supersónicos y subsónicos.
El Ala de Combate No. 22. Tiene como responsabilidad básica la planificación y ejecución de misiones de búsqueda y rescate, tanto en apoyo a la aviación civil comercial, como a las operaciones militares de combate propias de la Fuerza Aérea.
El Ala No. 24 Escuela Superior Militar de Aviación. Es el centro de formación de los pilotos militares ecuatorianos.
El Ala No. 31. Está ubicada en el oriente ecuatoriano.
El Comando Aéreo de Transportes. Bajo este comando se integran las unidades de transporte aéreo y el Ala de investigación y desarrollo. Su misión básica es proveer la capacidad de transporte táctico y estratégico, dentro o fuera del territorio nacional y, conjuntamente con unidades especiales del Ejército y la Armada Nacional, ejecutar misiones aerotransportadas. Este comando tiene a su cargo el apoyo al desarrollo en lo que a transporte aéreo se refiere, en todo el territorio ecuatoriano.
El Ala de Transportes No. 11. Conformada por un grupo operacional, logístico y de apoyo.
Ala de Investigación y Desarrollo No. 12. Está integrada por el Instituto Tecnológico Superior Aeronáutico (ITSA) y el Centro de Mantenimiento de la Fuerza Aérea (CEMFA).
El Comando de la Defensa Aérea. El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas ha delegado a este comando la responsabilidad de la defensa antiaérea de la nación. Aquí se integran todas las unidades de defensa antiaérea de las tres ramas de las Fuerzas Armadas bajo un comando único y centralizado, con la misión principal de proteger áreas militares y estratégicas vitales del Estado.
Unidades de apoyo. La Dirección de Materiales de la Fuerza tiene por responsabilidad la planificación y ejecución de todas las actividades logísticas en apoyo a las misiones operacionales de la Fuerza Aérea. La Dirección de Educación es la responsable del proceso de entrenamiento, formación y capacitación de oficiales, aerotécnicos y empleados civiles. La Dirección de Bienestar Social busca brindar servicios complementarios, asistenciales y recreativos a todos los miembros de la institución, con la finalidad de mantener en alto la moral y mejorar la productividad de todos los miembros de la fuerza.
Organigrama de la Fuerza Aérea
Capacidades
El Estado ecuatoriano como parte de su política de defensa, explota y controla el espacio aéreo nacional, a fin de contribuir al logro de los objetivos nacionales de seguridad, soberanía e integridad territorial. El poder aeroespacial de la nación incluye a la aviación militar, la civil, la comercial, la privada y la deportiva; la preparación profesional de sus miembros; la infraestructura e industria aeronáutica y la educación del personal.
La Fuerza Aérea Ecuatoriana por sus características técnicas se convierte en bastión fundamental de la defensa del Estado. Por su naturaleza es de carácter ofensiva, y está controlada por un mando único, lo que le permite tener una respuesta inmediata ante cualquier amenaza. En tiempo de paz, a través de la defensa aérea y con el apoyo de la aviación civil, realiza la vigilancia y control del espacio aéreo nacional.
También tiene como su responsabilidad dirigir y controlar las operaciones de búsqueda y salvamento aéreo. El sistema SAR posee los medios necesarios para paliar los efectos de desastres naturales, catástrofes y siniestros, así como los producidos por accidentes aéreos.
Educación
La formación de oficiales de la Fuerza Aérea se inicia con el reclutamiento de los aspirantes que han pasado por un riguroso proceso de selección, en el cual se evaluaron sus aptitudes psíquicas, académicas y físicas. Los cadetes, durante los cuatro años de formación, adquieren un nivel de educación superior. En el cuarto año inician su formación en vuelo por el período de un año; aquellos que lo culminen se graduarán como subtenientes pilotos.
Los cadetes técnicos, a partir del segundo año, son transferidos a la Escuela Superior Politécnica del Ejército, donde completan su educación superior a nivel profesional en las especialidades de electrónica, ingeniería mecánica, administración y cartografía. Luego de este proceso continuarán su formación en las bases aéreas recibiendo entrenamiento especializado en los diversos equipos que opera la Fuerza Aérea.
Al Instituto Tecnológico Superior Aeronáutico (ITSA) ingresan bachilleres para recibir su educación y formación tecnológica, y graduarse en especialidades de electrónica comunicaciones y mantenimiento.
Este instituto de educación superior también acoge alumnos civiles que desean obtener una tecnología en una de las especialidades mencionadas. La localización del ITSA en Latacunga, provincia de Cotopaxi, y la calidad de su educación lo han convertido en el principal centro de formación para carreras técnicas en aeronáutica.
Contribución al desarrollo
La Fuerza Aérea contribuye al desarrollo nacional a través de sus programas de Acción Cívica, que enlazan los sitios más apartados del país, dando especial atención a la región amazónica. Además ejecuta programas de Alas para la Salud y Alas para la Educación en zonas vulnerables del territorio nacional.
La Fuerza Aérea desarrolla diversas actividades destinadas a mejorar la calidad de vida de la población ecuatoriana. Entre sus principales contribuciones tenemos dos:
- Transportes Aéreos Militares Ecuatorianos (TAME). Esta empresa fue creada el 16 de mayo de 1962 por la Fuerza Aérea con la misión de enlazar las ciudades pequeñas del territorio patrio con los centros de desarrollo urbano. Constituye la principal línea aérea del Ecuador y su misión fundamental es servir a la población ecuatoriana. En la actualidad opera hacia doce ciudades con frecuencias diarias dentro del territorio nacional e incluso hacia países vecinos; atiende nueve rutas a las que la aviación comercial privada no se extiende, por considerarlas no rentables.
- Dirección de la Industria Aeronáutica. Tiene bajo su responsabilidad el mantenimiento de las aeronaves militares. Su desarrollo tecnológico se ha evidenciado en la capacidad que posee de realizar inspecciones mayores y la modernización de los escuadrones de combate supersónicos de la Fuerza Aérea, lo cual ha permitido el ahorro de divisas y ha generado fuentes de trabajo para la colectividad. Además la Dirección también se ha desarrollado en el campo de la aeronáutica civil, realizando las inspecciones mayores de las aeronaves Boeing y Fokker de la empresa TAME y de la aviación comercial civil.