III REUNIÓN DE MINISTROS EN MATERIA DE SEGURIDAD PUBLICA DE LAS AMÉRICAS (MISPA III)

Puerto España, Trinidad y Tobago, 17 y 18 de noviembre de 2011



Con la presencia de la Primer Ministra Kamla Persad-Bissear y el Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, se dio comienzo a la III Reunión de Ministros en Materia de Seguridad Publica de las Américas (MISPA III). La misma contó con la presencia de observadores provenientes de China, España, Francia, Japón, los Países Bajos y Rusia. Además, estuvieron presentes miembros de organismos y entidades regionales y subregionales, entre los que se destacan la CAN, el CARICOM, el SICA y el BID. A su vez, se hicieron presentes miembros de organizaciones internacionales como la Cruz Roja, el Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo en América Latina y el Caribe (UN-LiREC), la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), el Banco Mundial y la Organización Mundial de la Salud; y de cooperación policial (Ameripol e Interpol).

También es destacable la asistencia de varios órganos de la OEA, como la Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) y la Junta Interamericana de Defensa (JID).

Una vez finalizada la ceremonia de bienvenida, se procedió a la elección de autoridades.
México propuso a Trinidad y Tobago como Presidente, opción elegida por aclamación. Colombia (país auto propuesto como anfitrión en la próxima MISPA) fue seleccionado como Vice-Presidente. Como segundo vicepresidente, también fue elegido por aclamación, Canadá.

Dando por concluida la elección de autoridades, el cargo de relator quedo a en manos de Chile, de acuerdo con la propuesta de Argentina.

La agenda no sufrió cambios, exceptuando la solicitud de Venezuela de incluir una exposición sobre las reformas de policía. Éste pedido fue aceptado.

Durante su discurso inaugural, el Secretario General de la OEA, destacó la necesidad de enfrentar a las redes criminales a través de la cooperación entre los países. Para ello considera esencial mejorar la gestión policial. Así, el foco de la MISPA estuvo en la policía y sus necesarios procesos de transparencia, rendición de cuentas y mejora de las capacidades, en el marco de la cooperación horizontal.

El Embajador Bayney Karran, representante de Guyana ante la OEA, tuvo a cargo el discurso de apertura de la primera sesión. Sus palabras señalaron la importancia de la seguridad ciudadana para la democracia, y la urgente necesidad de fortalecer la cooperación en éste ámbito, siempre en el marco del respeto de los derechos humanos.

El gobierno de Trinidad y Tobago, destacó durante su presentación, la reformulación que han sufrido los principios de la policía, enfatizando la participación de la comunidad en las cuestiones referentes a su seguridad, la capacitación y educación policial, su conexión con otras instituciones públicas, y demás puntos que contribuyan a mejorar la visión y confianza ciudadana en la policía. A su vez, destacó la cultura policial de laissez faire como un desafío pendiente, que dificulta las relaciones con la comunidad. De cualquier forma, también ha experimentado otro efecto: un aumento en las denuncias debido al acercamiento con la comunidad.

En su discurso, los representantes por Venezuela, relataron los cambios que experimentó la policía desde la instalación de la Comisión Nacional de Reforma Policial (CONAREPOL) en 2006, aplicados con la finalidad de alcanzar en 2012 un cuerpo policial de 18.000 miembros.

En primer lugar, y de acuerdo al diagnostico de la ciudadanía, se creó el Viceministerio del Sistema Integrado de la Policía, dependiente del Ministerio del Interior.

A su vez, se creó la Policía Nacional Bolivariana, el Fondo Intergubernamental de Policía, (para el apoyo a las policías estatales y municipales), los Comités Ciudadanos de Control de Policía (como sistema de control externo) y la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad para la Formación Policial (para la cual contaron con el apoyo de Nicaragua, Cuba, Canadá, Reino Unido y la Cruz Roja).

A continuación, la presentación de Canadá estuvo enfocada en los sistemas de control policial, señalando dos niveles de rendición de cuentas: interno y externo (consiste en investigaciones en caso de que se violen los códigos de conducta).

La Royal Canadian Police (RCMP), con aproximadamente 20.000 miembros, es responsable de la relación con el público y, en caso de que existan denuncias, éstas son revisadas por un sistema federal, civil y externo: la Comission for Public Complaint against the RCMP. Por ser un sistema externo, incrementa la transparencia y la rendición de cuentas.

La sesión también contó con la relatoría del Gobierno de Chile. La misma se enfocó en la política del actual gobierno, destacando la creación del Ministerio del Interior y Seguridad Pública y otras nuevas instancias como el Consejo Nacional de Seguridad Pública (y sus equivalentes regionales), los programas Barrio en Paz, Plan Cuadrante de Carabineros, Chile Seguro y la Estrategia Nacional de Drogas.

También se hizo mención a un proyecto de ley sobre orden público, que si bien aún no es discutido a nivel parlamentario, está enfocado a aumentar las penas por desórdenes en manifestaciones públicas.

El Salvador destacó los avances en materia de promoción de los derechos humanos y de género. Señaló, a modo de ejemplo, que se han incluido materias vinculadas a los Derechos Humanos en la curricula académica de las Universidades Nacionales, configurando un marco de referencia en la Academia Nacional de Seguridad Pública

A su vez, destacó el cambio de políticas “de mano dura” (que mostraron resultados sólo en lo inmediato, sin generar mayor seguridad) hacia una policía orientada a la solución de problemas.

Entre los comentarios, la delegación de Nicaragua mencionó que el enfoque de género es fundamental para garantizar la seguridad, y que éste debe darse en todos los aspectos: desde la igualdad de oportunidades hasta la conveniencia institucional, ya que las demandas de seguridad de hombres y mujeres son diferentes.

A su vez, Granada, mencionó el déficit de capacitación existente y el riesgo cuando no existe confianza en la policía.

El representante de Ecuador, destacó la utilidad de la relación entre la policía y la comunidad para romper paradigmas y prejuicios de ambas partes.

Por su parte, el representante de Saint Kitts and Nevis señaló que frente a los problemas comunes (drogas, el uso de armas y la violencia homicida), es necesario aprender de las buenas prácticas y analizar la participación del sector privado.

Por último, la delegación de República Dominicana recomendó conocer las experiencias recientes, como la política de seguridad aplicada en el Municipio de Santa Tecla en San Salvador y la UPP en Río de Janeiro.

En la segunda sesión, moderada por el representante de Costa Rica, se escucharon las presentaciones de Colombia y Costa Rica.

La primera (Colombia) estuvo centrada en mostrar el modelo de direccionamiento policial instalado en el país, con énfasis en la cultura de calidad, la gerencia de procesos y la gestión del talento humano. Su plataforma educativa policial está basada en competencias con exigencias mínimas como la orientación de servicio a la comunidad, la efectividad con respeto a los derechos humanos y la capacidad de resolución de conflictos.

A continuación, la presentación de Ecuador, se centró en el mejoramiento de las condiciones laborales de los policías experimentado en ese país, lo que ha implicado la entrega de viviendas fiscales, mejora en las remuneraciones, horarios, servicios de salud y capacitación. Destacó también la Estrategia de Seguridad Integral, que incluye, entre otros planes, la implementación de un servicio telefónico único con plataforma automatizada para la atención de emergencias y denuncias.

Posteriormente, la delegación de El Salvador concedió espacio al Secretario General del SICA, Juan Alemán, quien expuso la postura común que han logrado los países de Centroamérica a través de su Estrategia de Seguridad y un plan de trabajo recientemente aprobado. El mismo, cuenta con un presupuesto y prioridades establecidas, entre las que se destacan la plataforma tecnológica para el intercambio de información, el reforzamiento de la seguridad fronteriza y proyectos enfocados en la reinserción social y el fortalecimiento; y la modernización institucional del sector seguridad.

Por último, la sesión de cierre estuvo a cargo del General colombiano Oscar Naranjo, Presidente de Ameripol.

En su discurso, agradeció el espacio que la OEA había facilitado a la organización que preside. A su vez, destacó el concepto de seguridad como derecho, y la necesidad de romper con las asimetrías institucionales en América. Para ello es necesario mejorar la capacitación en ciencias policiales, ya que actualmente es difusa, variada y antagónica en América Latina.




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